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Millones en mordidas por visitar a los presos
Las mordidas que han erogado familiares y amigos de los casi 230,000 reos o sujetos a proceso en el sistema penitenciario mexicano, para no ser molestados cuando los visitan, significó el pago de dádivas por 787 millones 677,111 pesos en los últimos dos años.
Las mordidas que han erogado familiares y amigos de los casi 230,000 reos o sujetos a proceso en el sistema penitenciario mexicano, para no ser molestados cuando los visitan, significó el pago de dádivas por 787 millones 677,111 pesos en los últimos dos años. Lo que implicó un gasto promedio de 3,424.6 pesos por cada preso.
Lo anterior, de acuerdo con los actos de corrupción identificados en el estudio Pagos de los Familiares de la Población Penitenciaria por Ingresar a los Centros y por llevar Comida del ICESI; en el reporte no se establece el pago de visita conyugal que varía entre 500 y 1,500 pesos, siendo los reclusorios del Distrito Federal los que encabezan las mordidas, seguido de Baja California Norte y Jalisco.
Ceferesos, en la lista
En el estudio se hace referencia que dicha práctica de corrupción por los custodios y carceleros no está exenta en los Centros Federales de Readaptación Social (Ceferesos), conocidos como Centros de Máxima Seguridad e incluidas las Islas Marías, que están bajo la tutela de la Secretaría de Seguridad Pública Federal (SSPF).
Los estados que tienen menos problemas por el cobro de mordidas o gratificaciones son Tlaxcala, Zacatecas y Campeche, de acuerdo con el estudio, pero no hay excepción en los 31 estados y Distrito Federal porque en todos se cobra todo.
La red carcelaria mexicana, según el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), está compuesto por 337 Centros Estatales de Readaptación Social (ceresos), en la ciudad de México son conocidos como reclusorios (Norte, Sur y Oriente) y la penitenciaría -donde están los sentenciados-, 93 centros municipales y seis ceferesos, entre ellos las Islas Marías.
En una anterior entrega de El Economista se estableció que el costo anual para mantener la saturada población penitenciaria es cercana a los 1,000 millones de pesos anuales, pero además existe una inactividad laboral que representaría $7,902.2 millones entre el 2007 y el 2008.
CAUSAS Y MOTIVOS
De acuerdo con la investigación del Instituto Ciudadano de Estudios Sobre la Inseguridad (ICESI), el volumen de personas recluidas tiene un impacto en la economía de las familias, pues en el interior de estos centros se mueve un mercado que merma los ingresos de familiares y amigos, toda vez que deben apoyar a sus parientes o conocidos, con cantidades que les permitan tener una estancia menos adversa .
rtorres@eleconomista.com.mx
