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Política

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Ofertas de trabajo, gancho para las víctimas de trata

De acuerdo con testimonios recabados por la CNDH, la captación de víctimas comienza con avisos en los diarios. En otros casos, el enganche se llevó a cabo por los mismos familiares de la víctima, y en otros tantos más hubo simplemente secuestro.

Para la explotación de las personas se realizan diversas estrategias. La captación de personas a través de ofertas engañosas de empleo es probablemente la más común, tanto para explotación laboral como sexual; lo mismo sucede respecto de la trata interna y la transfronteriza.

Con base en los testimonios recabados por la CNDH, la captación comienza con avisos en los diarios, se ofrecían trabajos de camarera. Luego, en las entrevistas personales, estudiaban a las mujeres para saber si tenían deudas o condiciones de vulnerabilidad. Las más susceptibles de ser explotadas eran contratadas como meseras y llevadas con todos los gastos pagados. En otros casos el enganche se ha llevado a cabo por los mismos familiares de la víctima, madre, padrastro, concubino o cuñada.

Incluso en el país, aún existe la práctica de vender o dar a las hijas, que puede conducir a la explotación sexual o en el trabajo doméstico. En otros casos son secuestradas.

Algunos de estos testimonios relatan el caso de una adolescente de 16 años de edad. Un día, una amiga me dijo que habían venido unas señoras de México y que estaban buscando gente que quisiera trabajar ahí. Hablé con ellas y me ofrecieron trabajo como mesera en un restaurante y me dijeron que me pagarían 400 pesos por semana .

Ella no tenía recursos para mantener a sus tres hijos. Aceptó y la llevaron a trabajar a un bar. Un cliente le pidió tener relaciones sexuales y se negó. Fue entonces cuando inició el martirio, la dueña me golpeó y me gritó ‘tú haces lo que yo te diga. Tú me debes dinero, lo que pagué para traerte hasta acá. Cuando me termines de pagar, haces lo que te dé la gana’ . En un solo día tuvo relaciones sexuales con cuatro clientes.

El padre de una menor relata que su hija fue a su clase habitual de inglés. En el plantel educativo, un muchacho le informó a la joven que afuera la buscaba una tía; al salir la amenazaron por la espalda con un arma y subieron a una camioneta, en donde había otras cuatro chicas.

Las llevaron a un bosque, desnudaron a tres de ellas, las violaron y tomaron fotografías. Luego volvieron a subirlas a la camioneta para llevarlas a una casa abandonada. Escuchó a los captores decir que las llevarían a México para prostituirlas. Sin embargo, en un descuido de los secuestradores logró escapar.

Otro de los relatos concentrados por la CNDH muestra el sufrimiento de una niña cuando tenía tres años, mi papá me vendió a una señora. Cuando tenía ocho años, un día la señora me dijo que ella no era mi verdadera madre y ya no podía hacerse cargo de mí, por lo que me iba a devolver con mis padres biológicos .

La regresó, pero su padre le notificó que había sido pedida en matrimonio. El adulto pagó 20,000 pesos, la violaba y me obligó a trabajar en un bar de su propiedad y a bailar en el tubo .

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