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Padrón de cabilderos, única medida de transparencia
El saliente presidente de la Cámara dejó como aportación un documento que es desconocido por los demás senadores.
El Senado de la República dio a conocer un programa de reorganización administrativa a través del cual entrará de lleno como sujeto obligado de transparencia. Sin embargo, el documento no modifica de manera radical la forma en que los grupos parlamentarios y los senadores manejan los recursos públicos. El único cambio fundamental en materia de transparencia que tendrá la Cámara es un padrón de cabilderos con el que se podrá detectar el conflicto de interés entre senadores y personas físicas y morales.
Ayer, la última acción del perredista Miguel Barbosa como presidente del Senado fue anunciar el programa de reorganización administrativa que mandata la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública, el cual debió aprobarse el pasado 30 de agosto.
El programa no lo conocieron los senadores a pesar de que Barbosa Huerta afirmó que ya se les había entregado. Ni integrantes de la Mesa Directiva ni coordinadores parlamentarios como Carlos Alberto Puente (PVEM) tuvieron el documento que, de acuerdo con Barbosa, ya se puso en práctica a pesar de que no lo votó el Pleno.
Con las nuevas disposiciones, el Senado deberá especificar los gastos de grupos parlamentarios, que ahora serán: asignación para la asistencia legislativa (grupos parlamentarios), asignación a comisiones y apoyos a órganos de gobierno y apoyo al trabajo legislativo y atención ciudadana (senadores).
Cada grupo parlamentario quedará en libertad de determinar la mejor forma de organización que convenga para el cumplimiento de sus objetivos .
Además, limita la verificación del uso de los recursos públicos ejercidos por las fracciones a la Contraloría Interna de la Cámara, haciendo a un lado a la Auditoría Superior de la Federación.
Deja claro que los legisladores y los grupos parlamentarios se encuentran regulados en materia fiscal bajo el régimen de tratamiento de un servicio personal subordinado , por lo que los legisladores reciben recursos por concepto de apoyo a las tareas legislativas y que dichos recursos no son considerados ingresos de conformidad a dicho ordenamiento legal .
El cambio radical que dieron los senadores en materia de transparencia es la elaboración de un padrón de cabilderos que se deberá dar a conocer este mes.
La Mesa Directiva será la responsable de llevar el registro de cabilderos, elaborar el padrón respectivo y mantenerlo actualizado. La tarea correrá a cargo de un secretario que la Mesa, que deberá designar la nueva presidencia de Roberto Gil.
Las personas físicas y morales interesadas en inscribirse en el padrón deberán especificar los temas de interés en los que pretenden participar y ante qué comisiones o senadores van a cabildear los temas. Los legisladores tendrán que describir lo solicitado por los cabilderos, información que será pública.
La falsedad de cualquier información aportada por la persona que forme parte del padrón de cabilderos o que cuente con la acreditación provisional implicará la cancelación en el mismo y/o pérdida de acreditación provisional .