Roban 16 aparatos para tomar datos biométricos

La creación de una Cédula de Identidad no sólo ha provocado disensos entre las fuerzas políticas por casi 20 años, que han evitado su puesta en marcha plenamente, sino también el robo reciente de sus aparatos para la obtención de datos biométricos del único sector que hasta el momento se ha podido enrolar: los menores de edad.

El Informe de Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2011 registra que han sido robados 16 equipos para datos biométricos de los menores, cuya pérdida es poco más de 2 millones de pesos.

En el documento de la Auditoría Superior de la Federación se indica que la Secretaría de Gobernación (Segob) ha adquirido un total de 2,500 equipos biométricos, los cuales fueron distribuidos en el país para recabar la información de los menores de edad.

De los 16 los equipos robados, ocho estaban en Jalisco, cuatro en Baja California, uno en Chiapas y tres en el Estado de México. La Segob, a través de la Dirección General de Recursos Materiales y Servicios Generales, se encuentra realizando las gestiones para solicitar el rembolso de los 16 equipos robados con un costo de 2,083.2 miles de pesos y a la fecha no se ha hecho efectivo el cobro del seguro contratado para su devolución, reza el informe de la Cuenta Pública 2011.

Aclara que después de una reunión de confronta, la entidad fiscalizada proporcionó dos reintegros efectuados a la Tesorería por 423.4 miles de pesos por indemnización de equipos biométricos robados, sin que se pudiera identificar a cuántos y a qué equipos corresponden los citados reintegros .

Desde 1992 se contempla en las leyes mexicanas expedir una Cédula de Identidad Ciudadana. El gobierno de Felipe Calderón retomó el proyecto.

Tras las diferencias con el Congreso, su emisión fue suspendida indefinidamente y sólo se prosiguió con el enrolamiento de los menores de entre cuatro y 17 años. El gobierno federal adquirió equipo y comenzó el proceso en escuelas.

El informe de la Cuenta Pública 2011 no refiere si los aparatos biométricos sustraídos contaban con información de menores.

El gobierno federal, en su Libro Blanco de la Cédula, argumenta que hay una inviolabilidad de los equipos de registro, debido a que están diseñados para que no se pueda extraer información de ellos. De igual forma, la comunicación entre el equipo de toma de biométricos y el Registro Nacional de Población está encriptada, argumentó la administración.

mauricio.rubi@eleconomista.mx