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Política

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Tamaulipas, nuevas alianzas de cárteles

La firma de geopolítica detalló que de ser auténtico el mensaje a Los Zetas, implica uniones estratégicas del Cártel del Golfo por la plaza.

La colocación de dos narcomantas con la supuesta firma del Cártel de Sinaloa en Tamaulipas a principios de abril, refleja cambios en el paisaje criminal del Estado a partir de la lucha interna del Cártel del Golfo, prevé la consultoría estadounidense Stratfor.

El mensaje era una amenaza para el líder de Los Zetas Miguel Treviño Morales, Z-40, y prometía sacar a este cártel de Nuevo Laredo, la plaza más fuerte para ellos. El mensaje de las narcomantas decía que Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, ofrecía su pleno apoyo al Cártel del Golfo. Si el mensaje es autenticado, implica que el Cártel de Sinaloa se ha alineado con Mario Ramírez Treviño , líder del Cártel del Golfo, explica Stratfor.

Mediante un análisis, la firma especialista en temas de seguridad detalló que este cambio afecta a otros grupos criminales que luchan por el control de los territorios del Cártel del Golfo, como Rey­nosa, estado de Tamaulipas.

La competencia por la plaza de Reynosa entre las facciones del cártel del Golfo culminó con la victoria de la facción liderada por Mario Ramírez Treviño, El Pelón, que tiene consolidado el control sobre la ciudad.

Facciones desconocidas del Golfo están coordinadas con el Cártel de Sinaloa y su aliado, Los Caballeros Templarios. Debido a esta alineación es probable que estos cárteles ajusten su estrategia en la lucha en contra de Los Zetas.

Si Ramírez Treviño ha perdido algunas capacidades al pelear en contra de Los Zetas en Tamaulipas o si ha desafiado a una facción leal al Cártel de Sinaloa o Los Caballeros Templarios; el Cártel de Sinaloa probablemente tendría que utilizar sus propios sicarios para incursiones en Nuevo Laredo. Los mensajes del 4 de abril también podrían reflejar los esfuerzos del Cártel de Sinaloa para tomar el control de Nuevo Laredo con sus propios recursos en lugar de los del Cártel del Golfo. Si estas amenazas marcaran una nueva campaña de Sinaloa para tomar el control de Nuevo Laredo, la violencia probablemente aumentará sustancialmente en la entidad, pues Los Zetas utilizarían todos los recursos disponibles para defender su fortaleza.

ana.langner@eleconomista.mx

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