Basilea III y Solvencia II crearán riesgos en ?el sistema financiero

La implementación de Basilea III en los bancos y Solvencia II en las aseguradoras tendrá implicaciones en el equilibrio financiero de las instituciones e influirá en los productos que ofrecen a la población, afirmó Guillermo Zamarripa, director de la Fundación de Estudios Financieros (Fundef).

Las normativas propuestas por los reguladores generarán distorsiones, destacó el extitular de la Unidad de la Banca, Valores y Ahorro de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Durante el panel Basilea III y Solvencia II, realizado el último día de la XXII Convención de Aseguradores de México, expresó que debe existir precaución en ponerle regulaciones que impliquen costos al sistema.

Para entender que la propuesta de regla de Solvencia II impone cosas excesivas, no lo sé, pero sí creo que es un riesgo latente, porque Europa va clavado para allá y Estados Unidos va en otra dirección, no hay cosas claras , enfatizó.

Guillermo Zamarripa destacó que al tener un sistema prudencial completo y adecuado, como el que existe actualmente, no se deberían incluir costos regulatorios y trabas que inhiban el desarrollo del sector financiero.

Si se quiere ser el más estricto pueden serlo, pero con ello se inhibe la toma de riesgo y el desarrollo de sistema , dijo.

En México, el sector asegurador ha tomado buenas decisiones tanto en supervisión como en regulación, lo que provocó que tanto la crisis de 1994 y la del 2008 no resultaran catastróficas para las empresas de seguros.

Actualmente, las cosas están controladas, en orden en el sector, no hay desequilibrios importantes , comentó.

Ahora, la implementación de los esquemas regulatorios se encuentra en discusión, por ejemplo, Solvencia II aún no se entrega al Congreso para su aprobación; de aplicarse la normativa para bancos y aseguradoras al mismo tiempo se generarán distorsiones en el mercado, reveló.

Agregó que la regulación también influirá en los activos de las instituciones financieras, por ejemplo, en los recursos que tendrán que destinar para la ejecución de los esquemas, lo cual generará riesgos de mercado, que haya segmentos que no se financien, además de competencia por capital.

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