Casas de empeño informales reciben objetos robados

Con base en cifras de la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Prendarios (Amespre), de las más de 9,000 casas de empeño que existen en el país, entre 1,500 y 2,000 son informales, es decir, no cuentan con ningún tipo de registro ante la autoridad. Son éstas las más proclives a recibir objetos robados, ya que aquí no se pide ningún tipo de documento comprobatorio.

No hay una cifra específica. Datos de la Procuraduría General de la República (PGR) refieren que los objetos robados constituyen entre 30 y 35% de los artículos que son empeñados en las casas prendarias. Por otra parte, documentos legislativos señalan que en 80% de los asaltos, los objetos van a parar a ese tipo de seudonegocios. Incluso la propia dependencia federal ha referido que el crimen organizado utiliza estos comercios para lavar dinero.

Lo cierto es que, en los últimos meses, se ha intensificado el empeño de objetos robados de todo tipo, en casas prendarias irregulares, lo que ha derivado que, desde los niveles federal y estatal, se tomen medidas para tratar de mitigar el fenómeno.

El año pasado se aprobaron en el Congreso modificaciones a la Ley Federal de Protección al Consumidor, entre cuyos cambios destaca que las casas de empeño deben reportar operaciones inusuales a las procuradurías locales. Es decir, si una persona presenta tres pantallas de televisión nuevas, con números de serie seguidos, esto prende un foco rojo y debemos mantener un registro y darlo a conocer , dijo Carlos Gómez, presidente de la Amespre.

A la par, en diferentes estados donde se ha detectado el fenómeno, se han tomado medidas como la modificación de las legislaciones locales y la realización de operativos. Por ejemplo, en los estados de México, Puebla y San Luis Potosí, por mencionar sólo algunos, se han cambiados las leyes locales para poner más orden en los negocios prendarios. En el Distrito Federal, apenas hace unos días, el gobierno capitalino y la propia Amespre firmaron un convenio en este sentido.

Los dependientes de las casas de empeño deberán exigir de los deudores prendarios, que comprueben la procedencia legítima de las prendas que reciban, por medio de notas o facturas y de no ser así, serán sancionados , plantea una propuesta legislativa presentada apenas en marzo pasado por un diputado federal.

REGULARES PUEDEN COADYUVAR CON AUTORIDAD

Carlos Gómez asegura que, en el caso de los asociados a la Amespre, no se han detectado casos similares, además de que ya tienen conexión directa con algunas procuradurías estatales.

Aunque reconoce que en las casas prendarias informales sí pueden registrarse situaciones de empeño de objetos robados y crear una mala imagen al sector en general, las formales, en contraparte, pueden coadyuvar con la autoridad para combatir a la delincuencia.

Las casas de empeño pueden ser un brazo derecho para las procuradurías en el tema de la prevención de delitos, a través de un sistema de intercambio de información , dice.

eduardo.juarez@eleconomista.mx