Lectura 3:00 min
Cercanos a Olvera Amezcua se colocan como acreedores comunes de Ficrea
La hermana y el cuñado realizaron inversiones en la sociedad financiera; eran considerados subordinados por el parentesco.
El proceso del concurso mercantil de Ficrea ha arrojado una sorpresa más para los ahorradores defraudados, que en un lapso de casi dos años apenas se les ha abonado 13.5% de lo que se les adeuda, pues, además de recibir a cuentagotas los pagos de lo que se les debe, ahora tendrán que compartir en las mismas condiciones lo recuperado con personas cercanas al presunto artífice de dicho fraude, Rafael Antonio Olvera Amezcua.
De acuerdo con el síndico del concurso mercantil de esta empresa, Javier Navarro-Velasco, en meses recientes Sheila Olvera Amezcua, hermana del presunto autor del fraude, así como el cuñado de éste, Carlos Jiménez García, lograron convertirse en acreedores de grado común y no subordinados como se encontraban al inicio de este proceso.
Ellos (Sheila Olvera y Carlos Jiménez) promovieron una apelación ante el Tribunal Unitario y éste les dio la razón (...) estamos en el proceso de apelación de esa decisión, nos opusimos a esa situación , explicó Navarro-Velasco.
Con este cambio de grado, ahora Sheila Olvera y Carlos Jiménez podrán recibir los recursos al mismo tiempo y condiciones que la mayoría de los acreedores de esta empresa, que son de grado común, según una decisión de un tribunal unitario, y no hasta el final del proceso como los acreedores subordinados, en caso de que todavía existieran recursos.
Desde que se dio a conocer este presunto fraude, a finales del 2014, los nombres de algunos familiares de Rafael Olvera Amezcua comenzaron a aparecer en la lista de defraudados, pues los rendimientos que daba Ficrea también los atraparon.
Según la lista a Sheila Olvera Amezcua se le deben 3 millones 378,668 pesos; a Carlos Jiménez García, 2 millones 943,820 pesos, deudas que en un inicio no se les reconoció dentro del grado común porque, según información del proceso, no presentaron ningún elemento de prueba para acreditarlos como tales ni como empleados de Ficrea, como ellos pretendían.
Se propone su reconocimiento como acreedor subordinado por relación con la fallida (...) Asimismo, es improcedente la manifestación planteada para el efecto de que se le reconozca el carácter de trabajador de la fallida, en virtud de que no aporta ningún laudo que acredite tal pretensión , se puede leer en la lista de objeciones respecto a estos dos personajes cuando se dio a conocer la lista definitiva de acreedores.
Pese a esto, en abril del presente año, el primer Tribunal Unitario de Circuito en materias Civil y Administrativa de la Ciudad de México remitió una resolución que determinó que tanto Sheila Olvera Amezcua como Carlos Jiménez García se les reconociera como acreedores del grado común.
De acuerdo con información del síndico, en la actualidad existen 4,909 acreedores de grado común, de los cuales la mayoría son defraudados de Ficrea que buscan, por medio del concurso mercantil, recuperar sus ahorros invertidos en esta empresa que funcionaba como sociedad financiera popular.
Los defraudados que se encuentran esperanzados en el concurso mercantil ya recibieron el pago de su seguro de depósito, equivalente a 25,000 Udis (132,000 pesos por el valor de la Udi en la fecha de la intervención de Ficrea); sin embargo, sus ahorros eran mayores a esta cantidad por lo que ahora buscan que con la liquidación de activos de esta empresa pueda recuperar su patrimonio.