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Guía para inversionistas en tiempos difíciles
Reducir deudas y ajustarse a un presupuesto son algunos consejos que del especialista Dave Kansas, quien lanza algunas advertencias sobre lo que no hay que hacer al invertir.
En tiempos como los que corren, es una gran tentación pensar que las cosas nunca mejorarán. Pero si la historia nos enseñó algo es que nada dura para siempre. Además, están comenzando a verse indicios de que lo peor ya pasó. Por ejemplo, los precios del petróleo han comenzado a subir, una señal de un aumento en la demanda. Y China ha vuelto a importar aluminio, afirma Dave Kansas, en un artículo publicado por The Wall Street Journal.
El director del sitio Web FiLife pone a consideración algunas estrategias para mantener la calma y concentrarse en uno mismo: cinco sugerencias que definitivamente debería seguir y otras cinco cosas que no debería hacer.
- ¿Qué hacer?
1. Reduzca su deuda más costosa : Lo primero que debe hacer es reducir las deudas costosas, incluso antes de ahorrar para su jubilación o invertir en acciones. Una estrategia inteligente es sacar ventaja de las cosas que hayan bajado de precio desde el comienzo de la crisis: ahorre la diferencia de lo que costaban cuando los precios estaban por las nubes.
2. Ajústese a un presupuesto: El ahorro está de moda. Eso significa ajustarse a un presupuesto, medir con exactitud lo que gasta y buscar formas de ahorrar dinero.
En Internet abundan los sitios gratuitos, como sindeudas.org o mercofinanzas.com, que ofrecen consejos para planificar los gastos y encontrar formas de ahorrar dinero. Cuando uno se dispone a modificar sus hábitos de consumo, puede ser muy útil hablar con otras personas que están haciendo lo mismo.
3. Protéjase contra la inflación: Una buena estrategia para protegerse contra la inflación es invertir en commodities. Cuando el crecimiento se recupere, la demanda de petróleo, cobre y otras materias primas subirá, produciendo un alza en sus precios. Una advertencia: dada la volatilidad de los commodities, los planificadores financieros recomiendan que los inversionistas no concentren más de 5% a 10% de su portafolio en este sector.
4. Tenga una estrategia bursátil: Las acciones, como la economía, no permanecerán a la baja para siempre. Asegúrese de mantener un enfoque diversificado entre acciones, bonos y efectivo y tenga en cuenta cuántos años le quedan antes de jubilarse para definir la proporción indicada para usted de acciones, bonos y efectivo.
5. Preserve lo que tiene: Una de las lecciones que se puede extraer de los últimos años es que participar en el mercado bursátil e hipotecar su casa no son formas de conseguir efectivo. Son activos y pueden subir y bajar. Es prudente tener una estrategia para conservar sus ganancias. Además de diversificar sus activos, también es conveniente que mantenga una diversificación en el mercado bursátil. Y siempre guarde un fondo de emergencia en algún lugar seguro, como certificados de depósito.
Un estándar generalizado es reservar el equivalente a seis meses de ingresos en caso de que se quede sin trabajo.
- Qué no hacer
1. No entierre su dinero: Tal como están las cosas, puede parecer demasiado atractivo renunciar por completo a cualquier tipo de riesgo financiero. Un exceso de temor puede costarle caro.
2. No vaya detrás de los retornos: No se sobrecargue de activos que han registrado un desempeño tan sobresaliente. Es probable que llegue a la fiesta demasiado tarde, ya que la mayor parte de las ganancias ya se han cosechado. Eso podría orientar su portafolio de forma muy pronunciada en una sola dirección, volviéndolo vulnerable a un descenso en grupos de activos que tenían un gran desempeño.
3. No abandone la diversificación: Sea disciplinado. Manténgase fiel a una estrategia diversificada y vuelva a equilibrar sus activos cada año para reducir su exposición a las acciones cuyos precios suben mucho más rápido que el promedio del mercado.
4. No deje de ahorrar para la jubilación: Debemos seguir siendo disciplinados para ahorrar para cuando llegue ese día. Analice sus ahorros para la jubilación y asegúrese de que sus activos estén diversificados y balanceados. Ignorar sus ahorros o dejar de aumentarlos le causará problemas cuando quiera dejar de trabajar.
5. No ignore el sentido común: Muchos de los problemas recientes se deben a la falta de sentido común. Las finanzas personales, en última instancia, se reducen a tener sentido común. Es imprescindible que elimine su deuda de alto costo y se ajuste a un presupuesto. Debe ahorrar para la jubilación. Y debe asegurarse de que pueda pagar la casa en la que vive.
En conclusión: sea prudente, ahorre e invierta de forma sensata. Volver a estas nociones básicas nos ayudará a todos a reconstruir nuestros portafolios y encaminarnos hacia una época mejor.
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