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Sector Financiero

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Las ganancias de las afores cayeron 63.7% en el 2022: Consar

La contracción en la utilidad del SAR es la más grande desde que se tiene registro para un cierre de año y está ligada al tope en la comisión promedio.

En el 2022, las administradoras de fondos para el retiro (afores) obtuvieron una ganancia de 5,691 millones de pesos, una reducción anual de 63.7%, en términos reales, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Sistema del Ahorro para el Retiro (Consar).

La contracción en la utilidad del SAR es la más grande desde que se tiene registro para un cierre de año y está ligada al tope de 0.57% en la comisión promedio del Sistema del Ahorro para el Retiro (SAR). Cabe señalar que los ingresos por comisión son la principal fuente de recursos para administradoras de fondos.

Asimismo, las cifras de Consar, a cargo de Iván Pliego Moreno, también revelaron que sólo dos administradoras (Invercap y Principal) registraron pérdidas el año pasado.

Carlos Ramírez, extitular del organismo regulador, comentó a este espacio que el 2022 fue un mal año para la industria por la combinación de ciertos factores como el tope a las comisiones o la alta volatilidad que provocó minusvalías.

“Fue un año muy duro. La fijación de las comisiones que hizo la Consar llevó a una reducción de golpe, sin precedentes y se estableció un tope. Era inevitable que les impactara en los ingresos. Sumado a que el gasto comercial y los traspasos siguieron altos”, comentó el también consultor económico y político de Integralia.

Las comisiones promedio que cobran las afores pasaron de 0.80 a 0.57% durante el 2022 y para este año se mantendrán sin cambio.

Carlos Ramírez sostuvo que si bien no está de acuerdo con el tope a las comisiones, porque es contraproducente para el sector, logró su propósito en una industria que ha ganado mucho dinero y que estaba acostumbrada a ganar siempre.

“Las afores se habían acostumbrado a generar un ingreso automático al ser gestores de fondos obligatorios, además de que los activos van creciendo por la propia secuencia de las aportaciones y la demografía”, explicó.

Tope a comisiones gran error

Abraham Vela, expresidente de la Consar, dijo a El Economista que el tope a las comisiones fue un grave error y se están viendo las consecuencias en las utilidades y en los ingresos de las afores.

“Si antes eran excesivos (los ingresos y ganancias), ahora son mermados y negativos. Que se tenga una industria con utilidades negativas y con ingresos pequeños puede tener consecuencias muy serias”, comentó Vela.

Para Vela Dib la baja agresiva en el cobro de comisiones pudiera reflejarse en un deterioro de la calidad en los servicios de inversión de las administradoras y en la calidad en los servicios de atención.

Además, agregó, que no todas las afores deben y pueden cobrar la misma comisión pues hay una desventaja para las administradoras más pequeñas, principalmente.

“Unas son muy grandes y están en posibilidad de cobrar menos comisiones por la economía de escala, es decir que sus costos fijos de administrar e invertir se reducen entre mayor es el número de cuentas y recursos administrados”, dijo Vela Dib.

Agregó que las afores más grandes tienden a ser parte de grupos financieros que cuentan con una presencia nacional a través de sucursales bancarias o corresponsales.

“Otras afores más pequeñas tienen nexos con cadenas de establecimientos comerciales y hay otras que son solo administradoras con presencia en América Latina y que son de tamaño mediano”, explicó.

El 2023 sería de recuperación

Carlos Ramírez prevé que este año sea de recuperación en la industria de la afores, espera que mejoren sus utilidades y se sumen a los esfuerzos de la Consar de reducir el gasto comercial.

“Lo que sí es un hecho es que olvidemos las utilidades que tenían antes del congelamiento de comisiones. Ya no verán el mismo nivel de utilidades que antes del proceso o lo lograrán en bastante más tiempo, cuando los activos crezcan. En el 2023 no veremos las utilidades del 2019”, dijo.

Cabe recordar que este año entró en vigor la última etapa de la reforma a la Ley de Seguridad Social, realizada en el 2020, en donde las aportaciones que realizan los empleadores a las administradoras pasarán de 6.5 a 15% del salario paulatinamente hasta el 2030, con lo cual las afores captarán 500,0000 millones de pesos por año.

santiago.renteria@eleconomista.mx

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