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Remesas, crédito y ahorro, las tareas de la nueva Financiera para el Bienestar
A partir de febrero próximo, el nuevo organismo, que sustituye a Telecomm, comenzará con su labor; afirma que su tarea no choca con el Banco del Bienestar, que sólo se dedica a la entrega de apoyos.
A partir de febrero próximo, la Financiera para el Bienestar, que sustituirá a Telecomm, iniciará operaciones formalmente con tres tareas principales: ser un dispersor de remesas en las más de 1,700 sucursales con las que actualmente cuenta; recuperar los préstamos otorgados bajo los esquemas de Tandas de Bienestar y Crédito a la Palabra, así como generar nuevos financiamientos, y ofrecer productos de ahorro en colaboración con la Secretaría de Hacienda y Nafin.
En entrevista, Rocío Mejía Flores, directora general de Financiera para el Bienestar, detalló la labor que tendrá este nuevo ente tras su transformación, que se complementará con las operaciones que actualmente ya ofrece Telecomm, como los pagos de servicios, gracias a su convenio que tiene con 11 bancos, y el cobro de impuestos.
"Nuestro objetivo es apoyar a todo ese segmento poblacional que arrancó su propio negocio, que tiene su proyecto local... Buscamos darle el andamiaje técnico y la fortaleza en su creación para mantenerse como una financiera popular, que atienda a la población en términos de crédito y ahorro y de recepción de remesas", comentó Mejía.
El pasado 21 de octubre, en el Diario Oficial de la Federación, se publicó el decreto que dio paso a la sustitución de Telecomm por la Financiera para el Bienestar. A partir de esa fecha, inició un periodo de 100 días para emitir el estatuto orgánico que sustente las nuevas labores del organismo, adscrito a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Gestor y originador de créditos
Una de las principales labores de este organismo será la recuperación de préstamos otorgados bajo el esquema Tandas para el Bienestar, operado por las secretarías de Economía y de Bienestar, además del programa de Créditos a la Palabra, gestionado por la Secretaría del Bienestar, con el fin de que, con el monto recuperado, se puedan ofrecer nuevos créditos en apoyo a los microempresarios.
En ese contexto, Mejía Flores apuntó que actualmente se trabaja en recopilar toda la información de ambos esquemas para saber cuántos hacen falta por pagar y así, diseñar productos específicos para la población objetivo.
De acuerdo con la funcionaria, en el esquema de Tandas para el Bienestar se colocaron cerca de 1 millón 500,000 créditos por un monto de 6,000 pesos cada uno, así como 80,000 financiamientos por 10,000 pesos cada uno, todos ellos sin cobro de intereses.
"Para el 2023, estaríamos hablando de la colocación de unas 100,000 Tandas para el Bienestar, de un monto mayor a 10,000 pesos cada una... se están haciendo buenos pagos, se acompaña con capacitación a los microemprendedores y tenemos buena tasa de retorno", comentó.
Respecto al esquema de Créditos a la Palabra, donde se otorgaban financiamientos de 25,000 pesos cada uno a una tasa de 6.5%, Mejía Flores reconoció que todavía no se tiene información precisa al respecto de cuánto es el avance de retorno de 1 millón 400,000 créditos que se otorgaron bajo este esquema, por lo que es complicado realizar estimaciones para el futuro.
"Estamos apenas en la recepción de información para que nosotros tengamos el dato, la persona que lo recibió, cuánto ha pago, dónde se quedó y hacer todas las gestiones de cobranza para que con ese dinero que se vaya recaudando se sigan dando más créditos", explicó Mejía Flores y añadió que en esta labor de cobranza se apoyará de los más de 20,000 Siervos de la Nación.
Remesas, punto de atención
Otro de los servicios en los que quiere destacar la Financiera para el Bienestar, es en la recepción de remesas, incluso por encima de otras opciones del sector de ahorro y crédito popular como las financieras populares, las cooperativas de ahorro y préstamo, así como de algunas microfinancieras.
"(El pago de remesas) es nuestra tarea número uno, para que nuestros paisanos en Estados Unidos puedan enviar remesas a través de las 40 remesadoras con las que tenemos convenio. No cobramos comisión aquí, son operaciones con rapidez y con el mismo tipo de cambio, con esas ventajas podemos ser más competitivos", apuntó.
En este contexto, este nuevo organismo también piensa ofrecer productos de ahorro para el segmento popular, pero al no poder captar recursos de manera directa por ser transmisor de dinero, buscará una alianza para poder ser intermediario del programa CetesDirecto.
La funcionaria negó que sus funciones choquen con la enmienda del Banco del Bienestar, el cual estará enfocado sólo en la dispersión de recursos de los programas sociales, por lo que ambos organismos serían complemento para atender con productos financieros en las zonas más alejadas del país.