Uphold busca ampliar las finanzas digitales en México

Uphold, una compañía que ofrece el servicio de wallet (cartera digital) global, quiere expandir las oportunidades para los usuarios del sistema financiero en México. Esta billetera permite compras fraccionadas e intercambiar diferentes activos sin antes hacer conversiones.

La Fintech fue fundada por el argentino Juan Pablo Thieriot, un emprendedor que inició su carrera en un banco de inversión, interesado en internet desde antes de la crisis del 2000. La experiencia le ha dado una expectativa clara de oportunidades en el sistema financiero.

“Uphold es una billetera digital global. Soportamos más de 50 criptomonedas, divisas, metales como oro y plata y, fuera de Estados Unidos, las acciones de bolsa del mercado estadounidense como Tesla, Google (Alphabet) o Apple”, explicó el empresario en entrevista con El Economista.

Bienes digitales fraccionables

Para el fundador de Uphold, en el futuro los aportes de internet en las finanzas —además de otros aspectos de la vida—, serán aún mayores:

“Nosotros creemos que eventualmente todos los bienes del mundo se convertirán en bienes digitales, fraccionables y tokenizados”, afirmó Thieriot.

Actualmente esto es apenas visto en áreas como el arte, gracias a tokens no fungibles (NFT), pero en Uphold consideran que podría extenderse incluso a grandes sectores como el inmobiliario y así sería posible que más personas accedan a algunos privilegios que no deben serlo.

“Personas que hoy no tienen el nivel de riqueza necesario para invertir en un fondo de Venture capital o beneficiarse de los ingresos de alquileres con una propiedad podrán hacerlo. De la misma manera, con nosotros no tienes que comprar toda una acción de Google”.

Con Uphold, si un usuario quiere adquirir sólo 10 dólares de participación en Alphabet (cuya acción tiene un precio en el mercado de más de 2000 dólares) puede hacerlo. “De esta forma buscamos democratizar los que antes eran los privilegios de la gente más rica”, dijo.

“Queremos completar el círculo”

Para Thieriot algo está claro, aunque las finanzas digitales “todavía están en pañales”, los bancos tradicionales están lejos de ser lo que nuevos usuarios buscan. “Requieren movimientos digitales 24/7 y de pocos gastos que en las finanzas tradicionales no encuentran”.

Una persona con cuenta de Uphold en Estados Unidos puede enviar a otra en México, también con cuenta, dólares, bitcoin, acciones y otros activos sin costo. Sólo en un aspecto, reconoce el emprendedor, están en deuda en el país, pues aún no ofrecen una tarjeta de débito.

“Todavía no hemos cumplido el círculo porque aún no tenemos una tarjeta de débito en México para que esto que se envía gratis se gaste, pero sí se puede que, por ejemplo, quien recibe bitcoin en México vaya a Bitso para mover este dinero digital a una cuenta bancaria”.

Para poder ofrecer ese último eslabón de la cadena, que ya tienen en Estados Unidos y Europa, Uphold está por cerrar negocios con dos bancos locales que quieren ofrecer bitcoin y oro a sus “decenas de millones de usuarios”. También busca eso en países como Brasil y Perú.

Avance de la economía digital

México es un país con algunas contradicciones y en el ámbito de tecnología financiera no está la excepción. Poco más de la mitad de los mexicanos no se encuentra dentro del sistema financiero, pero un porcentaje mayor a ese tiene teléfono móvil y la mayoría con internet.

Sobre este contexto que es semejante en América Latina, Thieriot dijo que quizá una comparación valida es la situación que se observó en la telefonía y su explosión debido a la llegada de los móviles. “Llega una nueva tecnología que no requiere tanta infraestructura y crece la penetración”.

Destacó también el efecto acelerante de la pandemia que compartieron los números del comercio electrónico y las finanzas digitales. A pesar de que los confinamientos más severos terminaron, dijo, los hábitos de los usuarios han evolucionado en una dirección digital.

“Cuando la gente se da cuenta que puede volver a salir, se ve una disminución importante de la actividad. Pero no es sólo en cripto, es en todas las actividades debido al verano post-Covid. Vemos un efecto de corto plazo, pero el movimiento hacia carteras digitales es inexorable”.

Herramienta para América Latina

Sobre América Latina, Thieriot dijo que México, Brasil, Colombia y Uruguay son países prioritarios para la expansión de la compañía. Además de su potencial de crecimiento en las finanzas digitales, tienen una gran cantidad de personas interesadas en alternativas a sus divisas.

Sobre México, específicamente, destacó la enorme demanda que existe de respuestas para el envío de remesas. Su principal mercado, Estados Unidos, podría convertirse en la puerta para aprovecharla, pero antes Uphold deberá concretar las negociaciones con bancos.

Para ambos casos, destacó que tienen fortalezas que algunos rivales no, principalmente la capacidad de negociar entre diferentes activos sin que sea necesario convertirlos a otras referencias, como es el dólar o bitcoin para el naciente mercado de las criptomonedas.

“Estamos hablando de la posibilidad de cambiar bitcoin o XRP por pesos sin necesidad de pasar por el dólar, que implica costos adicionales y que, con la volatilidad de las criptos, implicaría dificultades con los precios. Hablamos de precios asegurados tras la confirmación”.

¿Quién es Uphold en el mercado?

De acuerdo con su fundador, Uphold tiene poco más de 7 millones de usuarios distribuidos de la siguiente forma: 1.5 millones en América Latina, 2 millones en Estados Unidos, 1.1 millones en Europa, además de 1.2 millones en Asia y algo más de 200,000 usuarios en Oceanía.

Su huella global está integrada principalmente por hombres de alrededor de 28 años, con interés en la tecnología y en las criptomonedas. El sistema operativo predominante en sus teléfonos móviles es iOS, que les genera un porcentaje de ingresos muy superior al de Android.

En 2021 sus números se han acelerado, ya que desde el 1 de enero de 2020 hasta julio de ese año incorporó 801,313 clientes, mientras que en ese mismo periodo, pero de este año, la cifra fue de más de 2.5 millones. Eso significa un aumento superior a 219 por ciento.

En cuanto al volumen de operación, la compañía reporta movimientos por 1,000 millones de dólares por mes, mientras en 2020, de acuerdo con las cifras de la empresa, la cantidad era de un tercio de esa cifra. “A pesar del verano pos Covid-19, persiste el crecimiento”, dijo.

jose.rivera@eleconomista.mx