Libre, el agente que mató a niño mexicano

El agente de la Patrulla Fronteriza (BP, por su sigla en inglés) quien el pasado 7 de junio disparó y asesinó al joven de 15 años, Sergio Adrián Hernández Güereca, tiene una semana de haber regresado a servicio, dijo Ramiro Correro, portavoz de esta organización del sector Paso Texas.

Informó que tras una averiguación, la cual involucra a varias agencias que atienden temas fronterizos, se determinó reingresar a este miembro de la BP en actividades alternas, que por motivos de seguridad no se revelaron.

Dijo a El Economista que el agente involucrado en el tiroteo se encontraba en el cumplimiento de su deber cuando un grupo de jóvenes lo atacó con piedras; entre ellos se encontraba Adrián. Sostuvo que una pluma, un clavo o una piedra pueden emplearse como armas mortales y detalló que cualquier elemento de esta agencia tiene la responsabilidad de resguardar su seguridad y la de las fronteras .

Hernández Güereca murió en Ciudad Juárez del lado mexicano del Río Bravo a causa del tiro en la cabeza que le dio el agente de la BP, cuyo nombre no ha sido revelado.

Los hechos ocurrieron en el Puente Negro, situado a un costado del Puente de Santa Fe, que separa a Ciudad Juárez de Texas.

Luego del suceso, las averiguaciones pasaron a jurisdicción del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por su sigla en inglés) y hasta el momento la resolución no se ha emitido.

El seguimiento del caso también es llevado por la Agencia de Aduanas y Protección, además de otras dependencias locales que se relacionan con los asuntos de seguridad y justicia en la frontera, explicó el vocero.

Ramiro Correro negó que en la Patrulla Fronteriza existan casos de racismo y discriminación, aseveraciones que son absolutamente incorrectas. Nuestra función es resguardar la frontera de contrabando, terroristas, armas o migración ilegal .

alangner@eleconomista.com.mx