Secuestraba desde oficina de la PGR

Luis Felipe Molina García, quien fuera auxiliar de un agente del Ministerio Público de la PGR en Jalisco, es señalado de haber secuestrado y asesinado al joven de 23 años, Julio Diego Velasco Muñoz, aprovechándose de la información que le proporcionó cuando el occiso levantó una denuncia por el extravío de su licencia de piloto.

La Fiscalía de Jalisco investigó ya a Luis Felipe Molina García, quien actualmente se encuentra prófugo por el asesinato.

El hoy occiso provenía de una familia dedicada a la venta del mármol y fue víctima de Luis Felipe Molina García, quien al saber de su buena posición económica, utilizó la información que proporcionó en la denuncia, para secuestrarlo y pedir a su familia un rescate de 200,000 pesos a cambio de su liberación, hecho que no cumplieron Molina ni sus cómplices, pues finalmente lo asesinaron.

Molina García ya fue investigador por el delito de secuestro y homicidio por parte de la Fiscalía de Jalisco, por lo que no puede ser enjuiciado nuevamente por la PGR.

Luis Felipe Molina García se desempeñaba como auxiliar de Ministerio Público de la PGR en Jalisco y, en complicidad con su tío, Artemio Molina Soberanis, y otros cómplices, utilizaba la información de personas -con alto poder adquisitivo- que presentaban una denuncia en las oficinas regionales de la PGR, para secuestrar y pedir cuantiosos rescates.

Además de su tío, Molina García tuvo como cómplices a Oswaldo Israel Martínez Salas y Sandra Anahí Hernández Martínez, ésta última sedujo al plagiado.

Molina García también está acusado del secuestro y homicidio de Alfonso Gerardo Lugo Cruz, por quien pidieron un rescate de 200,000 pesos. El cuerpo de Lugo Cruz apareció el pasado 24 de agosto en la carretera a Saltillo a la altura del kilómetro 17, en las inmediaciones del poblado de San Esteban en Jalisco.

El cuerpo apareció aquel día amarrado de las manos, con los pies sujetos con una cadena y el rostro cubierto con cinta canela.

Molina es buscado por la Fiscalía de Jalisco, acusado del delito de secuestro y homicidio. Además, la PGR tiene abiertas otras investigaciones paralelas en contra de este sujeto, pues la dependencia federal está impedida legalmente para abrir una investigación similar a la indagatoria estatal.