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Crecen 152% la compra de oro por los bancos centrales en el 2022
El Banco de México, con reservas por encima de las 120 toneladas, se ubica en el lugar número 35, superado por países emergentes como Brasil, Turquía e India.
Las compras de oro por parte de los bancos centrales del mundo repuntaron 152.32% y alcanzaron una cifra récord durante 2022, gracias al atractivo que vieron las instituciones en el activo en medio de la volatilidad en los mercados y las altas tasas de inflación.
De enero a diciembre del año pasado, la demanda de los bancos centrales ascendió a 1,135.7 toneladas, de acuerdo con datos del Consejo Mundial del Oro (WGC, por sus siglas en inglés).
El volumen de demanda durante el año pasado es la mayor cifra de la que el WGC tiene registro (su dato más antiguo es de 2010), además de que la tasa de crecimiento es la más alta desde el 2011.
Con ello, los bancos centrales del mundo cerraron 2022 con un total de reservas por 35,715 toneladas de oro, con un valor total de 2.1 billones de dólares.
El banco central que compró más oro el año pasado fue el de Turquía, que agregó a sus arcas 148 toneladas del metal precioso, según datos del WGC. Cerró 2022 con reservas totales de 542 toneladas.
El Banco de México (Banxico) cerró el 2022 con reservas totales por 120.03 toneladas de oro, misma cifra con la que concluyó el año 2021. El valor total de las reservas ascendió a finales de diciembre pasado a 6,999 millones de dólares.
El WGC explicó en su último reporte “Tendencias de demanda del oro”, que de acuerdo con su más reciente encuesta, hay dos factores clave que motivan a los bancos centrales a mantener reservas de oro: su desempeño en tiempos de crisis y su función como reserva de valor a largo plazo.
“No es de extrañar que en un año marcado por la incertidumbre geopolítica y la inflación desenfrenada, los bancos centrales optaron por seguir añadiendo oro a sus arcas a un ritmo acelerado”, aseguró el WGC.
Ana Azuara, analista de Materias Primas en Banco Base, explicó que el Banco Central de la República de Turquía se ha visto obligado a comprar oro, debido a la alta inflación en el país. “El oro sirve como una manera de cubrirse contra la inflación”, dijo.
La analista dijo que, a diferencia de otros bancos centrales que han implementado una política monetaria restrictiva, el de Turquía ha recortado sus tasas de interés, lo que ha provocado tasas de inflación sumamente elevadas.
El año pasado la inflación de Turquía alcanzó un nivel de 85% aunque para diciembre bajó al 64%”, dijo Ana Azuara.
De acuerdo con el reporte del WGC, la mayor parte de las compras de oro por parte de los bancos centrales las hicieron países en desarrollo, “extendiendo la tendencia iniciada en 2010”, año desde el que éstos se convirtieron en compradores netos de oro, es decir, que adquieren más del que venden.
“El anuncio más significativo llegó a finales del año pasado, cuando el Banco Popular de China (BPC) informó del primer aumento de sus reservas de oro desde septiembre de 2019”, dijo el WGC. “Estos anuncios fueron significativos dada la posición histórica de China como un gran comprador de oro”.
En noviembre y diciembre, el banco central chino anunció compras por 62 toneladas de oro, elevando sus reservas totales a más de 2,000 toneladas por primera vez en la historia, indica el reporte.
Fed, a la cabeza
De todos los bancos centrales, la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos es el que tenía la mayor cantidad de reservas al cierre de 2022, con un total de 8,133.5 toneladas.
En segundo lugar se ubicaba el Banco Federal Alemán, con una reserva de oro de 3,355.1 toneladas, seguido en tercer lugar por el Fondo Monetario Internacional (FMI) que tenía 2,814.0 toneladas del metal.
Italia y Francia se ubicaban en cuarto y quinto lugar, con reservas por 2,451.8 y 2,436.8 toneladas, respectivamente.
México, con reservas por encima de las 120 toneladas, se ubicaba en el lugar número 35, superado por países emergentes como Brasil, Turquía e India.
Demanda histórica
El crecimiento en las compras de oro por parte de los bancos centrales llevó a que la demanda del metal precioso en general alcanzara durante 2022 un máximo de 11 años.
La demanda total de oro a nivel mundial ascendió a 4,740.7 toneladas, un aumento interanual de 18.14%, según el WGC.
Las existencias de oro sobre la superficie cerraron 2022 en 208,874 toneladas, con un valor de 12.2 billones de dólares.
La cifra de la demanda total se obtiene de sumar las compras de los bancos centrales, de la demanda en joyería, tecnología y en inversiones (barras, monedas y ETFs).
La demanda en joyería bajó 1.83% a 2,189.8 toneladas en el año, mientras que en tecnología disminuyó 6.56% para un total de 308.5 toneladas.
En su reporte, el WGC explicó que la baja en la demanda de joyería se explica por el repunte de los precios que experimentó el metal precioso durante la mayor parte del 2022, además de que hubo menores compras en China por los bloqueos impuestos para contener al Covid-19 a finales del año.
Por su parte, la demanda de oro para inversiones (barras, monedas y ETFs) creció 10.47% a 1,106.8 toneladas.
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