“La cultura también es espacio de contradicción”: Lucina Jiménez

Hemos de desaprender muchas formas de relación cultural en las que se ha afincado una sociedad que privilegia el dinero, los objetos, las cosas, el petróleo. Si hoy en día podemos romper las fronteras entre nuestras propias miradas y podemos acercarnos a la justicia epistémica, generaremos profesionales con muchas mayores herramientas”. 

Lucina Jiménez, directora del INBAL.

“Nunca como ahora había sido tan crucial asumir la formación de profesionales, el desarrollo de investigación y la difusión de la cultura, tres tareas fundamentales de las universidades, como una responsabilidad social, ética, ecológica, igualitaria y política ante la urgencia de un modelo civilizatorio (…) (pero) ¿estamos realmente formando profesionales de las artes para responder a estos dilemas?”.

Es un planteamiento que la doctora Lucina Jiménez López, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), lanzó ante la comunidad académica de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, representantes de diversas instituciones educativas nacionales y del extranjero y funcionarios del gobierno federal durante su conferencia magistral e inaugural del foro internacional “Las universidades del mundo: políticas culturales y desarrollo sostenible de los países”.

Este encuentro, que se amplía hasta este martes, forma parte de las actividades complementarias de la Conferencia Mundial de la UNESCO sobre Políticas Culturales y Desarrollo Sostenible – Mondiacult, que entre el 28 y el 30 de septiembre reunirá para dialogar en la Ciudad de México a unos 160 ministros de Cultura del orbe.

En este contexto, Jiménez instó a representantes, académicos y alumnos de las instituciones educativas a asimilar que “este ambiente que vivimos, de cambio climático, de violencias de género, de racismos, de clasismos y de desigualdad, nos llama a fortalecer el papel de las instituciones de educación superior, públicas y privadas, para responder a las exigencias de nuestro tiempo”.

Una exigencia, buscar la justicia epistémica

Quizás la exigencia más importante de nuestra era, dijo, una que deberán asumir las universidades del mundo sin distinción, será la búsqueda de “justicia epistémica”, un término acuñado por la filósofa inglesa Miranda Fricker como ese estadio social que permita la igualdad de oportunidades en el acceso a la educación, en la distribución de recursos, contenido y discurso educativo.

“Me refiero al hecho de no seguir imponiendo una sola visión, una sola cosmogonía, una sola mirada para entender el mundo cuando el mundo nos está diciendo que muchas otras miradas han sido negadas y han sido marginadas e incluso destruidas al quitarle las bases desde las que existen sus cosmogonías”, declaró, y en particular hizo énfasis en la marginación de las comunidades indígenas y en el insondable sometimiento hacia las mujeres.

En este sentido, la también Premio Internazionale Universum Donna 2017 dijo que es el momento para revolucionar la cultura y asimilarla de una vez como la argamasa de una nueva era para la humanidad, pero no por ello se le ha de exentar de ser también una fuente de conflicto.

“No podemos decir que la cultura es la solución a todo, porque la cultura misma está infectada de esas plagas. El racismo es parte de la cultura y nadie alude a él porque pareciera ser que siempre ha estado ahí (…) se puede ser creador artístico y ser profundamente clasista e imponer una sola estética. Entonces, la cultura tanto es espacio de conflicto y de contradicción como es espacio de pensamiento, reflexión y acción”.

El deseo de no pertenecer es también un derecho

Hacia el cierre de su conferencia, Jiménez López señaló que acotar a las personas dentro de un sólo estigma porque así lo dicta la tradición contribuye a la marginación. Sin embargo, sumó que incluso el deseo de no pertenencia es un derecho cultural.

“Hoy en día, las transformaciones que están viviendo los procesos culturales y artísticos nos dicen: ‘no queremos miradas binarias, no queremos clasificaciones estables, lo que queremos son derechos’ (…) Los tiempos en los que el Estado decía cuál es la identidad ya pasaron. De hecho, nunca debió de ser así, pero entendemos los tiempos históricos. Hoy en día las diversidades exigen sus lugares y sus espacios”.

Por último, señaló: “no esperemos las grandes revoluciones para insertarnos en ellas. Hagamos física cuántica: trabajemos desde los procesos pequeños, periféricos, donde las cosas se pueden mover y tarde o temprano terminarán transformando los centros. No esperemos a que los resultados de Mondiacult nos digan por dónde tenemos que caminar”, concluyó.

Los temas del encuentro:

• “Las políticas culturales necesarias en el contexto civilizatorio actual de sus regiones y países, así como su contribución al desarrollo sostenible”
• “La función transversal de la cultura como eje para el trabajo de las universidades y su impacto/incidencia en el desarrollo sostenible y la vida social”
• “Universidad y políticas culturales para una educación incluyente y de calidad hacia el 2030”

Este martes, la conferencia magistral:

• Mtra. Sylvia Schmelkes del Valle
• Instituto de Investigaciones para el Desarrollo de la Educación. Universidad Iberoamericana Ciudad de México
• 10:20 –11:00Auditorio Crescencio Ballesteros Ibarra

Inauguran Foro Mondiacult Universidades en la Ibero

Poner la cultura en el centro

Durante el acto inaugural del foro, el rector de la Ibero Ciudad de México, doctor Luis Arriaga Valenzuela, señaló que para aportar a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, “debemos diseñar e implementar políticas culturales con la capacidad de construir puentes de entendimiento y diálogo que ayuden a las sociedades a construir, reconocer y respetar la diversidad, la riqueza de la pluriculturalidad”.

Por su parte, Pablo Raphael, director general de Asuntos Internacionales de la Secretaría de Cultura, confirmó que para esta segunda edición de Mondiacult se esperan compromisos como la efectuación de un foro permanente de cultura, el trabajo para colocar a la cultura en el centro de las políticas de desarrollo y, por ello, construir un objetivo de Desarrollo Sostenible dedicado a la cultura para la Agenda 30–45.

ricardo.quiroga@eleconomista.mx