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Atlanta muestra que se puede tener éxito con poco

Una de las cualidades de Halcones no es precisamente el dinero, pero ser uno de los clubes que menos pagan no lo limita.

Con una inversión por debajo de los 65 millones de dólares en salarios, es posible que una franquicia pueda disputar las semifinales de conferencia en la NBA, o al menos eso han demostrado algunos combinados en las tres fases de los ?playoffs previos.

En la presente postemporada, Atlanta Hawks es el equipo que enfrenta la segunda etapa de los ?playoffs con la nómina más baja, con 58.3 millones de dólares, que lo coloca en el sitio número 28 de las 30 quintetas que conforman la liga. La anterior cifra equivale al sueldo que obtienen Joe Johnson, Deron Williams y Brook López de Nets, representativo al que derrotó Hawks por 4-2 en la primera ronda de los playoffs.

En las tres temporadas previas, la inversión en su nómina va a la baja; por ejemplo, en la temporada 2011-2012 destinaron para los salarios de los jugadores 70.9 millones de billetes verdes. Una temporada después, la cantidad se redujo a 66.4 millones de dólares (2012-2013); una fase regular posterior, la cifra fue de 58.4 millones de dólares (2013-2014) y para la presente campaña el monto quedó en 58.3 millones de dólares. Sus jugadores no se ubican entre los que más ganan; el dominicano Al Horford se coloca en el sitio 42, con un salario de 12 millones de dólares, y hasta el sitio 60 se puede encontrar al estadounidense Paul Millsap.

Dicha situación no ha repercutido en asegurar su participación en los playoffs, aunque su actuación se ha limitado a la primera etapa de la postemporada. Durante la primera fase de la competencia, le ganó cuatro de seis juegos al combinado que más invirtió en la presente campaña, Brooklyn Nets (88.4 millones de dólares), y su misión es ahora dejar en el camino a Washington Wizards.

En caso de que Hawks supere a Wizards y Chicago supere a Cleveland, la final de la Conferencia del Este se daría entre dos conjuntos que no invirtieron más de 70 millones de billetes verdes en sus plantillas, y en caso de vencer a Bulls, podría aspirar a concluir con la sequía de títulos, pues el último lo obtuvo en la fase de 1957-1958 bajo el nombre de St. Louis Hawks.

La quinteta que comanda Mike Budenholzer concluyó la temporada en el primer lugar de la Conferencia Este, al acumular con 60 victorias por 22 derrotas lo anterior significó el mayor número de juegos ganados en la historia de la quinteta y una de las casualidades es que bajo circunstancias casi similares San Antonio Spurs (63.3 millones de dólares) logró el campeonato el año pasado, ya que en la fase de las semifinales se colocó como la segunda quinteta con la nómina más baja en la competencia, pues Portland Trail Blazers accedió a la segunda parte de los playoffs con una nómina de 62.9 millones de dólares.

Antes de que Spurs obtuviera el Larry O’Brien, en las semifinales de conferencias del 2012-2013 fue Memphis el que se caracterizó por ser el de la nómina menos onerosa y llegó hasta las finales de conferencia; en el 2011-2012, Indiana Pacers accedió hasta dicha etapa de la competencia con sólo 44.4 millones de dólares.

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