Brillo en austeridad: el título de México en natación artística

México volvió a escribir su nombre con letras de oro durante este fin de semana gracias a la histórica medalla que consiguieron un grupo de ocho atletas durante la Copa Mundial de Natación Artística que se celebra en Egipto. Pero el brillo de este logro va más allá de la foto en el podio, pues representa un mérito a la resiliencia y la determinación.

Obtener la presea de oro en esta competencia se veía lejos para una delegación que en los últimos meses ha encarado adversidades profundas: la falta de apoyos económicos gubernamentales desde la instancia responsable de los atletas, la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), aunada a la desorganización que impera en la propia Federación Mexicana de Natación (FMN).

Estos problemas y otros subyacentes provocaron que las atletas de natación artística se vieran en la necesidad de vender trajes de baño en redes sociales para poder recaudar fondos y poder viajar a Egipto, una noticia que incluso tuvo impacto a nivel internacional.

Ya en el evento, celebrado en el Complejo Olímpico Senzo Sporting Club de la ciudad de Somabay, Egipto, México se llevó el oro en la prueba de técnica mixta tras alcanzar un puntaje de 270.1584. Italia se quedó con la plata, pues aunque recibió idéntico puntaje en dificultad, no pudo superar los puntajes de ejecución e impresión artística y se quedó con 268.8417 puntos.

El podio fue completado por Francia, que ingresó al evento con la dificultad más alta declarada, 30.8, pero que no pudo ejecutar con cercanía a perfección la rutina de "Viaje al espacio" y terminó en tercer lugar por la medalla de bronce con 253.5312 puntos.

Las ganadoras para México fueron las atletas Regina Alferez, María Fernanda Arellano, Daniela Estrada, Itzamary González, Glenda Inzunza, Luisa Rodríguez, Jessica Sobrino y Pamela Nuzhet, quienes decidieron impactar a los jueces, espectadores y al mundo entero a través de una rutina inspirada en Freddie Mercury al ritmo de ‘Don’t stop me now’, de Queen.

A pesar de no contar con apoyos económicos gubernamentales, las nadadoras lograron sufragar sus gastos gracias a la colaboración de la marca Safetti México, que fue la que les brindó los trajes de baño que pusieron en venta en redes sociales. En el sitio web de dicha marca, se especificaba el objetivo de cada transacción: “Todas las ganancias de la venta de este traje serán destinadas para los gastos de la Selección Nacional de Natación Artística”.

Nuria Diosdado, figura de México en esta disciplina en los Juegos Olímpicos de Tokio (junto a su compañera Joana Jiménez), fue la principal gestora de la venta de los trajes en el mercado online, e incluso, días antes de la Copa Mundial de Egipto, señaló en sus perfiles de redes sociales que si alguna otra marcaba estaba interesada en apoyar a la delegación que se contactara a través de ella.

Además, desde mediados de abril la delegación de natación artística fue recibida por el empresario Arturo Elías Ayub, director de Fundación Telmex, ya que tanto él como su suegro, el magnate mexicano Carlos Slim Helú, les ofrecieron patrocinios y apoyo económico en vista de su situación desfavorable frente a Conade y la FMN.

De acuerdo con una publicación de Nuria Diosdado en redes sociales, se declaró que la delegación podría realizar el viaje a la Copa Mundial de Egipto gracias al apoyo de este par de empresarios, así como de marcas en las que destacaban Safetti, Adidas, Arena, Oysho, Quore, Dry Up, entre otras, haciendo posible la participación que terminó con una medalla histórica.

Durante su participación en la final, las atletas portaron un traje en tono verde limón, pero anteriormente, cuando realizaron el viaje a la sede, no utilizaron ningún aditamento que hiciera alusión a la bandera mexicana, sino que vistieron en negro.

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