Cuando la caminata mexicana entró al túnel

Fue uno de los deportes más fructíferos para México en competencias internacionales durante casi 20 años en la rama varonil. Entre los años 1980 y 2000, la caminata parecía ser una de las disciplinas que pondría muy en alto el nombre de nuestro país y que este éxito se postergaría unas décadas más.

Lo cierto es que después de esas décadas, la marcha mexicana ha ido en decadencia. Mientras de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984 a Sydney 2000, los marchistas nacionales consiguieron siete de las nueve medallas olímpicas con las que cuenta México en esta disciplina, 23 preseas panamericanas y cinco medallas mundiales, en los últimos dos ciclos olímpicos apenas han logrado cinco medallas panamericanas, una mundial y ninguna olímpica.

LA MARCHA, ¿EN CRISIS?

Es por ello que muchos aseguran que la marcha mexicana está en crisis, sin embargo figuras como Éder Sánchez, reciente medallista en 20 kilómetros en el encuentro Internacional de Marcha 2011, parecen desafiar lo sombrío de ese panorama y buscan hacer renacer esta disciplina en México.

Los mexicanos tenemos muy buen nivel y la marcha está demostrando que tiene atletas que pueden lograr grandes cosas, que podemos estar entre los mejores del mundo y que es una disciplina que está despuntando de nuevo como hace algunos años , aseguró Sánchez, campeón centroamericano, a El Economista.

No obstante, Éder es el único que parece tener reales posibilidades de lograr buenos resultados en Juegos Panamericanos (Guadalajara 2011) y Juegos Olímpicos (Londres 2012). Su palmarés incluye el oro en los JCC Mayagüez 2010, el bronce en el campeonato mundial de Berlin en el 2009 y ocupa el octavo puesto del ranking mundial de la IAAF en este año.

Especialista en 20 kilómetros, Sánchez dice que la causa de que México haya perdido el camino del éxito en la caminata es la falta de atención en atletas juveniles.

Hacen falta más atletas con ganas, más apoyo para la gente que viene de abajo porque ellos ganan una competencia y no se les da seguimiento. Pero también deben tener entrega y pasión por lo que hacen, así nuestro país va a ir mucho más adelante , indicó.

Éder espera recomponer el camino y olvidar el capítulo doloroso que significó la olimpiada de Beijing 2008 en donde se esperaba una medalla y terminó en el sitio 15. Fue un mal día, una mala experiencia .