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Faith Kipyegon corona su historia en los 1,500 metros
La keniata sigue reescribiendo su dominante marca en los 1,500 metros, siendo la defensora del título Mundial y Olímpico. Es la primera mujer en ganar tres títulos mundiales.
Faith Kipyegon dejó claro en la pista de Budapest que ella manda en los 1,500 metros. Un reinado que ha conquistado año tras año en competencias Olímpicas y Mundiales. La keniata logró su tercer oro mundial en esa distancia y los suma a los obtenidos en 2017 y 2022.
La velocista hace más grande su leyenda al también poseer el oro olímpico en 2016 y 2022 y adueñarse de los récords mundiales en los 1500 m y 5000 m.
En Budapest tuvo que enfrentarse en la final a la múltiple medallista de oro olímpica y mundial Sifan Hassan, a la medallista de plata olímpica Laura Muir y los talentos etíopes en ascenso Diribe Welteji y Birke Haylom. Pese a estos grandes nombres, Kipyegon controló la carrera desde el frente y no hubo manera de alcanzarla en la recta final, alejándose para ganar en 3:54.87. Welteji se quedó con la plata y Hassan con el bronce en 3:56.00.
"Esta es una gran temporada para mí: batir récords mundiales y convertirse en campeona mundial, defendiendo mi título. Me dije: 'Tú eres la más fuerte, sigue adelante'. Hoy perseguía este título y perseguía la historia”.
Para darle más perspectiva, Kipyegon es tan grande en los 1,500m como Eliud Kipchoge lo es en la prueba de maratón, solo que el keniata no se inscribió en Budapest porque le dará prioridad al Maratón de Berlín. Ambos son guiados en la ciudad de Kaptagat por el entrenador Patrick Sang.
Kipyegon guarda una de las historias de vida más auténticas en el mundo del track and field.
Ella es la séptima de ocho hermanos y creció en Ndabibit, un pueblo rural en el valle del Rift de Kenia. Su agente Valentijn Trouw, cuenta que Kipyegon caminaba varios kilómetros de ida y vuelta hacia su escuela, y luego, comenzó a correrlos.
Compitió en sus primeras carreras juveniles descalza, a los 16 años y continuó así hasta su edad actual de 29. Su entrenador le regaló sus primeros tenis, y de ese episodio, ella recuerda su reacción:
"Corría descalza porque me sentía cómoda. Le dije a mi manager 'Gracias por estas hermosas zapatillas' pero no sabía cómo usarlas, era una niña joven y cuando corría descalza me sentía cómoda y corría libremente".
Su primera gran carrera internacional fue el campeonato mundial de cross-country de 2010 en Polonia. Corriendo descalza, quedó cuarta en la carrera sub-20. Al año siguiente, en la misma carrera, y nuevamente corriendo sin zapatos, ganó.
Desde temprana edad demostró un talento notable al conseguir el oro en el Campeonato Mundial Juvenil de 2011 y 2012, estableciendo un nuevo récord en el evento. También hizo su debut en los Juegos Olímpicos de Londres y compitió en el Campeonato Mundial de Moscú, antes de cumplir 20 años, quedándose con el quinto lugar, única vez que compite en un Mundial senior y no obtiene medalla.
La visión de Kipyegon es única. No considera que los nuevos avances en la tecnología de los tenis sean la clave de sus récords
“No creo que el zapato esté funcionando, estoy corriendo. Simplemente me pongo el zapato, creo en mí mismo y simplemente voy y rompo el récord mundial. Entrenando y teniendo confianza. Creyendo en lo que puedes hacer, creo que todo es posible”.