China, al borde de la deflación; precios al productor cayeron 5.4%

Los precios de producción de China cayeron en junio a su ritmo más rápido en más de siete años, mientras que los precios al consumo se tambalearon al borde de la deflación, lo que refuerza la necesidad de que los responsables políticos apliquen más estímulos para impulsar la demanda.

El índice de precios al productor (IPP) cayó 5.4% respecto al año anterior siendo el descenso más pronunciado desde diciembre del 2015, informó la Oficina Nacional de Estadísticas, con lo que hiló nueve descensos consecutivos.

Por su parte, el índice de precios de consumo (IPC) se mantuvo sin cambios anuales, impulsado por una caída más rápida de los precios del cerdo. Esto frustró las expectativas de un alza de 0.2% y supuso el ritmo más lento desde febrero del 2021.

El empeoramiento de la deflación de los precios industriales y el avance de los precios al consumo hacia la deflación son un mal augurio para el crecimiento económico de China.

El impulso de la recuperación de China tras la pandemia se ha ralentizado desde repunte observado en el primer trimestre, con un debilitamiento de la demanda de productos industriales y de consumo, lo que aumenta la preocupación por la segunda mayor economía del mundo.

Creemos que el entorno de deflación más desafiante y la fuerte desaceleración en el impulso del crecimiento apoyan nuestra opinión de que el Banco Popular de China (PBOC, por su sigla en inglés) ha entrado en un ciclo de recorte de tasas”, dijeron economistas de Barclays en una nota.

Nomura Securities estima que los precios al consumo caerán 0.5% anual en julio, aun teniendo en cuenta un posible aumento de la inflación de los servicios por las vacaciones de verano.

“Esperamos que la inflación general se sitúe en torno a 1% para finales de año. Sin embargo, esta cifra seguiría siendo suave y no limitará la capacidad del PBOC para relajar aún más la política”, mencionaron economistas de Capital Economics.