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“Difícil que se cumpla marco macroeconómico de SHCP en el 2022”
Para el cierre del 2021, el gobierno espera un PIB de 6.3%, las estimaciones más recientes apuntan a que la expansión fue de 5%; para este año esperan un crecimiento de 4.1%.
Luego de conocer los datos más recientes de la economía mexicana al cierre del año pasado, así como las revisiones a la baja en los pronósticos de crecimiento para México por parte de diversos organismos, a lo que se suma una cuarta ola de contagios causados por la variante Ómicron, analistas ven complicado que se cumpla el marco macroeconómico propuesto por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para este año.
De acuerdo con los Criterios Generales de Política Económica, el gobierno espera que al cierre del 2021 la economía se haya expandido a una tasa de 6.3%; los datos recientes del último trimestre del 2021 apuntan a que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) sea de apenas 5.00 por ciento. En tanto, para este año, la proyección de Hacienda es de un crecimiento de 4.1 por ciento.
En este sentido, James Salazar, subdirector de Análisis Económico de CIBanco, indicó que desde un principio el estimado de 4.1% parecía bastante optimista pero, ante una expectativa de un menor crecimiento a lo esperado en el 2021, se podría alcanzar la tasa proyectada para este año ante una menor base de comparación de la que se tenía pensada.
“Luce muy optimista aún, pero no se puede descartar todavía porque no tenemos más información de que en el último trimestre del 2021 se perdió impulso. Será difícil de alcanzar. La mayoría de los indicadores no se van a cumplir pero, en el caso del PIB, no tiraría la toalla”, señaló el analista, quien recordó que en Estados Unidos se ha visto una recuperación más fuerte, la cual podría tener impacto positivo en México.
“El gran error que se cometió fue mediático. A mitad de año, después de que pasamos la tercera ola, el banco central en un reporte presentó tres escenarios, en donde se habló de una tasa de crecimiento para el 2021 de alrededor de 6.00%, y Hacienda se colgó de eso para su estimado del año pasado, y para noviembre y diciembre eso empezó a cambiar”, recordó Luis Pérez Lezama, director de Investigación Económica de Saver ThinkLab.
Impacto en finanzas
Un menor crecimiento al esperado se traduce en un menor consumo interno, lo que impacta en la recaudación de ingresos por concepto del Impuesto al Valor Agregado (IVA), además de que se genera una menor inversión fija que repercute en la generación de empleos y, por lo tanto, el pago del Impuesto sobre la Renta (ISR) explicó Raymundo Tenorio, catedrático del Tec de Monterrey.
Lo anterior, añadió, también afecta al gasto público ya que son con estos ingresos con el cual se solventa y, al no llegar a la meta, se podrían plantear recortes al gasto en algunos rubros y/o dependencias.
El martes pasado, Raquel Buenrostro, jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT) aceptó que los ingresos tributarios se verán afectados este año por la variante Ómicron, así como por los altos niveles de inflación.
“Cuando se hicieron las proyecciones para la Ley de Ingresos del 2022 no se consideró el Ómicron ni la alta inflación que estamos viendo. Muchos países, afortunadamente México entre ellos, tienen un gran porcentaje de vacunados; sin embargo en Estados Unidos y Europa hay un gran porcentaje de no vacunados (...) a estos países, con menor población vacunada, les está pegando más duro (el virus) y ello está afectando al comercio exterior y, aunque nosotros no tengamos la misma crisis, nos perjudica en relaciones”, declaró en conferencia de prensa.
De acuerdo con la proyección del gobierno, este año se esperan 7.08 billones de pesos de ingresos, de los cuales 3.9 billones provendrán del pago de impuesto de los contribuyentes.
“Cortos” con la inflación
Respecto a las otras variables del marco macroeconómico, el pronóstico de inflación de 3.4% para el cierre de este año “se queda corto”, consideraron analistas, ya que las presiones inflacionarias en la parte de mercancías persisten, y aún no hay una recuperación completa en todas las actividades económicas, sobre todo en el sector de servicios, cuya recuperación ha quedado rezagada.
“Están esperando un nivel de inflación muy bajo. Se quedaron con lo que tenía Banxico en ese entonces (previo a la entrega del Paquete Económico 2022, en septiembre) y Banxico ya modificó su expectativa. Luce muy complicado que la inflación baje de 4% este año”, apuntó James Salazar.
Sobre el tipo de cambio, agregó que se podrían generar depreciaciones del peso frente al dólar, sobre todo en la segunda mitad del año por la expectativa del endurecimiento de la política monetaria por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos, lo que podría llevar a que se supere los 20.4 pesos por dólar estimados por la SHCP.
Otra variable que no se cumplirá será la del precio del barril de petróleo, lo cual podría dejar mayores ingresos, pero tal vez no los suficientes en caso de una caída de los ingresos tributarios. De acuerdo con Hacienda, se espera que la mezcla mexicana se venda en 55.1 dólares por barril; sin embargo, podría tener un promedio entre 60 y 65 dólares por barril.