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En AL incertidumbre mundial y política restrictiva impactan
Las previsiones están sujetas al impacto del cambio climático en la actividad económica y la incertidumbre geopolítica.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), ajustó a la baja su pronóstico de crecimiento para la región y lo dejó en 1.8% para este año.
La nueva previsión se encuentra debajo de 2.1% previsto en mayo por ellos mismos e incorpora el efecto de un crecimiento moderado en el mundo y la posibilidad de un aterrizaje menos moderado del que esperaban en la primera parte del año.
En la presentación del Estudio Económico número 76 que desarrolla la Cepal para la región, el director de desarrollo económico, Daniel Titelman, explicó que estas previsiones están sujetas al impacto del cambio climático en la actividad económica y la incertidumbre geopolítica.
Desde su perspectiva, la media de los países enfrenta un panorama de restricción fiscal y monetaria que reducen el margen de esperar un estímulo para sus economías.
Titelman anticipa que los bancos centrales seguirán recortando las tasas de interés, ya que fueron los primeros que optaron por flexibilizar sus posturas monetarias, pero advierte que la postura seguirá siendo restrictiva, lo que desalentará consumo, inversión y financiamiento.
El experto agregó al panorama el impacto que tendrá la desaceleración económica de Estados Unidos para México y Centroamérica en el comercio y el flujo de remesas.
Y enfatizó que será determinante el desempeño que logrará España para el envío de remesas hacia Sudamérica.
En la presentación del estudio, el secretario ejecutivo, José Manuel Salazar Xirinachs, explicó que sólo cuatro de los países de la región mostraron un aumento en la actividad económica durante el primer semestre del año: República Dominicana, impulsada por el turismo, a quien proyectó un crecimiento de 5.2% para este año.
Chile, que destacó por impulso del sector minero, lo que permitió mantener el crecimiento esperado en 2.6%; Perú, con la recuperación del sector pesquero que le permite sostener una previsión del PIB en 2.6% y Costa Rica, por su desempeño positivo en servicios e inversión en equipos médicos.
Hizo mención aparte para Guyana, que sigue cosechando expansiones de doble dígito que para este año estarán en 29.2%, alimentadas por el descubrimiento de yacimiento de petróleo, pero cuyo dinamismo no se refleja de forma importante en la región pues carecen del peso suficiente para impulsarla.
Moderado desempeño
Las dos economías más grandes de la región, Brasil y México, que aportan 57% del PIB regional, no contarán con la fuerza para dar un impulso mayor al PIB de América Latina y el Caribe en este año.
La estimación de crecimiento para México fue recortada a 1.9% desde 2.5% que mantuvo en el primer semestre del año.
Para Brasil, que es la primera economía de la región, anticipan un crecimiento de 2.3% anual, previsión similar a la que tenían en mayo pasado.
En el extremo colocan a Haití y Argentina, las únicas economías que registrarán este año una recesión.