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Mujeres en puestos directivos aumentan 20% la productividad de empresas
Cuando las compañías tienen a mujeres en puestos directivos, la productividad es mayor entre 5 y 20%; el problema es que la presencia femenina en las posiciones empresariales más altas sigue lejos de la paridad de género, reveló la OIT.
Cuando las compañías tienen a mujeres en puestos directivos, la productividad es mucho mayor entre 5 y 20%; el problema es que la presencia femenina en las posiciones empresariales más altas sigue lejos de la paridad de género, reveló la Organización Mundial del Trabajo (OIT).
De acuerdo con el reporte “Las mujeres en la gestión empresarial: Argumentos para un cambio”, divulgado por la OIT, indica que con base en encuestas aplicadas a casi 13,000 empresas de 70 países, mostró que cerca de la tercera parte de las compañías que promovieron la diversidad de género en cargos directivos incrementaron resultados entre 5% y 20%, porcentaje que en la mayoría de los casos fue de entre 10 y 15 por ciento.
Asimismo, casi 57% de las empresas encuestadas afirmó que la inclusión de las mujeres contribuyó a atraer a profesionales con talento y favoreció mejoras en materia de creatividad, innovación y apertura, indicó el organismo con sede en Ginebra, Suiza.
De acuerdo con el reporte, la diversidad de género da beneficios empresariales si las mujeres ostentan, al menos, 30% de cargos directivos y de gestión, pero esas condiciones no se cumple en casi el 60% de las compañías.
Las empresas no son sexistas, pero…
Según el informe, uno de los obstáculos que más dificultan el acceso de la mujer a puestos directivos es que la cultura empresarial “exige disponibilidad en todo momento y en cualquier lugar”. Esto las afecta de forma desproporcionada, pues socialmente ellas tienen más responsabilidad en el cuidado doméstico y familiar.
En la encuesta, 70% coincidió en que la cultura organizacional de su empresa representa la de su sociedad. Por ello, la OIT insta a fomentar la conciliación del trabajo con la vida personal, implementando horarios flexibles y licencias para el cuidado de los hijos, y no sólo con las mujeres, pues los hombres también necesitan tiempo para corresponsabilizarse.
“Las empresas no son necesariamente la causa de los prejuicios sexistas”, pero bien pueden optar por no reforzarlos. Eso lo logran a través de la gestión de recursos humanos y mediante mensajes de equidad de género transmitidos por los máximos cargos ejecutivos.
Para eliminar el obstáculo de la disponibilidad absoluta, la OIT indica que algunas empresas están introduciendo sistemas y tecnologías para enfocarse más en el rendimiento o la productividad, junto con acuerdos de trabajo flexible. “Ello podría ser incluso más eficaz y sostenible”.
Las políticas de promoción de más mujeres en cargos directivos deben establecer procedimientos que permitan contratar, mantener y ascender al personal, ofrecer oportunidades de formación profesional y ejecutiva, así como permisos de maternidad.
Pero todo esto sin una remuneración equitativa poco ayudará. En todo el mundo, las mujeres ganan en promedio 22% menos que los hombres por el mismo trabajo. Al respecto, muchos países han creado leyes que prohíben un menor pago.
Sin embargo, la OIT señala que más que esperar medidas punitivas, los empleadores deben asumir su obligación de respetar el salario de las trabajadoras. Asimismo, eliminar la idea de que ellas pueden hacer solo cierto tipo de actividades.