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América planta cara a Asia-Pacífico en semiconductores
El valor de ventas de este lado del Pacífico es inferior, pero este y y el próximo año crecerá más rápido, en momentos en los que EU ejecutará una ley para fomentar la producción en Norteamérica e invitó a México a formar parte de la cadena de valor.
El continente americano lidera el crecimiento del mercado mundial de semiconductores, considerando los resultados de 2021 y las proyecciones para 2022.
Después de crecer 27.4% interanual en 2021, el mercado de semiconductores de América aumentaría 23.7% en 2022, para cerrar en este último año en 150,064 millones de dólares, según estimaciones de World Semiconductor Trade Statistics (WSTS).
WSTS se fundó en 1986 como una organización sin ánimo de lucro de empresas de productos semiconductores y es la única fuente de estadísticas mensuales de envíos del sector.
Por su parte, el mercado de Asia-Pacífico registraría crecimientos en ese mismo orden de 26.5 y 10.5%, hasta 396,481 millones de dólares.
Las distintas tendencias avanzan mientras el Congreso estadounidense aprobó recientemente la Ley CHIPS, que asignará más de 50,000 millones de dólares en fondos públicos para incentivar a las empresas de semiconductores a que construyan instalaciones de fabricación en Estados Unidos.
WSTS espera que el mercado mundial de semiconductores aumente 13.9% en 2022 y que siga creciendo 4.6% en el 2023.
La industria de los semiconductores se caracteriza por la rapidez de los cambios tecnológicos, que a menudo dan lugar a la introducción de nuevas tecnologías para satisfacer la demanda de los clientes y a la obsolescencia de la tecnología y los productos recientemente introducidos.
Como parte de su estrategia para ampliar la producción de semiconductores, el gobierno de Estados Unidos ha invitado a México a crear sinergias bilaterales con ese propósito.
Tras una fuerte alza de 26.2% en el año 2021, WSTS prevé otro año de crecimiento de dos dígitos para el mercado mundial de semiconductores en 2022, con una estimación de 633,000 millones de dólares, 13.9% más.
WSTS proyecta una fuerte demanda de chips por otro año consecutivo, y se espera que la mayoría de las categorías principales tengan un crecimiento interanual de doble dígito en 2022, liderado por la Lógica con un crecimiento de 24.1%, seguido por la Analógica (+21,9%) y los Sensores (+16.6 por ciento).
La optoelectrónica sigue siendo la categoría más débil en la previsión y se espera que sea aproximadamente plana (+0.2%) año tras año.
A nivel mundial, Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC) indica que la competencia ocurre principalmente en las tecnologías de proceso, la excelencia en la fabricación, la confianza de los clientes y la calidad del servicio, como por ejemplo una preparación tecnológica más temprana, una mejor calidad, una mejora más rápida del rendimiento y un tiempo de ciclo más corto.
Procesos determinan competencia
El nivel de competencia en el sector varía en función de las tecnologías de proceso. Por ejemplo, en las tecnologías más maduras, los competidores suelen ser numerosos y ofrecen procesos especializados.
Algunas empresas compiten en determinadas regiones geográficas o en nichos de mercado. En los últimos años, otras empresas han realizado importantes inversiones para establecer nuevas capacidades de fundición en todo el mundo, o para transformar determinadas operaciones de fabricantes de dispositivos integrados en capacidades de fundición.
WSTS pronostica que el mercado mundial de semiconductores siga creciendo en el 2023. Para ese año, prevé que el mercado crezca 4.6%, hasta alcanzar los 662,000 millones de dólares, impulsado por un crecimiento de un solo dígito en casi todas las categorías de mercado.
Algunos ejecutivos de empresas de semiconductores de todo el mundo, como la consejera delegada de AMD, Lisa Su, predicen que la escasez mundial de chips será menos grave durante la segunda mitad de 2022.
Sin embargo, el Departamento de Comercio de Estados Unidos refirió que en una sesión informativa financiera celebrada en octubre de 2021, el director general de Intel, Pat Gelsinger, predijo que la escasez de semiconductores continuará al menos hasta 2023.