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El lobby por los vegetales: aguacate de Jalisco por papa de Colorado

El embajador Ken Salazar fue pieza política clave para que la papa fresca de Colorado tenga las puertas abiertas de México, lo que representa un riesgo sanitario enorme, a decir del líder de los productores de papa en México. El ingreso de la papa a México fue la moneda de cambio para que el aguacate de Jalisco tenga cupo en las importaciones estadounidenses. Esta es la historia.

El embajador de Estados Unidos en México, Kenneth Lee Salazar, no sólo mantiene una buena relación personal con el presidente Andrés Manuel López Obrador, sino que finalmente ha logrado —materializado a partir de mayo de 2022— sacar adelante una gestión en la que tiene al menos 10 años empeñado a favor de los productores de papa de Colorado, su estado natal, y de 21 entidades más de ese país: la apertura de México a las importaciones de ese tubérculo, en el marco del acuerdo comercial entre los dos países.

La moneda de cambio fue el aguacate de Jalisco, que no por coincidencia empieza este año a exportarse a Estados Unidos. El riesgo sanitario, apunta el presidente de Conpapa (Confederación Nacional de Productores de Papa), Gerardo García Menaut, es enorme.

“Hemos reclamado que no se debe importar papa fresca por el riesgo de las plagas cuarentenarias porque sería desastroso para el país”, explicó el líder empresarial, quien también es vicepresidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA).

Desde que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto dio luz verde a las importaciones, en 2014, se interpusieron recursos legales y se ganaron diversos juicios ante el Poder Judicial federal, que tuvieron por efecto impedir que se diera el proceso de importaciones de papa. Pero la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), en una decisión polémica, en 2021, decidió dejar la decisión en manos del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), una instancia administrativa del gobierno mexicano responsable de la regulación.

Para García Menaut, la decisión de la Corte sentó un grave precedente, pues renunció a juzgar una controversia para la cual es claramente competente e impide el acceso a la justicia del demandante. “Respetamos a la SCJN pero creemos que se equivocó al tomar esa decisión”, dijo.

García Menaut apuntó a los intereses del embajador Ken Salazar, quien cuando se discutió el tema en los tiempos de la presidencia de Felipe Calderón Hinojosa, era secretario del interior del Gobierno de Barack Obama.

Ken Salazar es hermano del representante demócrata por Colorado, John Tony Salazar, quien desde el principio asumió la presión al Gobierno mexicano para asegurar la apertura de las exportaciones.

La relación del embajador Salazar con el tema la confirma el exsecretario de Agricultura y Ganadería de los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón (respectivamente, entre 2005 y 2006, y de 2009 a 2012), Francisco Mayorga Castañeda.

“Recuerdo que, en mi primera gestión, la oposición ya era fuerte por parte de los productores nacionales. El mismo hermano del presidente Fox, Pepe Fox, era productor de papa y se oponía terminantemente a la importación de papa fresca. […] Ya en mi gestión con el presidente Calderón, era el secretario de Agricultura de la Administración Obama, Tom Vilsack, el que encabezaba las negociaciones. En ese entonces se presentó la solicitud de Jalisco para exportar aguacates y la detuvo a condición de que se destrabara el tema de la papa”, explicó Mayorga Castañeda.

En diciembre de 2010, durante la Conferencia de las Partes sobre Cambio Climático (COP16), “me entrevisté con el secretario de agricultura Vilsack. Él aseguraba que se podía mover la papa fresca sin riesgos sanitarios, pero la gente de Senasica me dijo que si se importaba a granel sí había riesgo, más si luego se pretendía usar como semilla. Lo que acordamos en Cancún fue nombrar un panel trinacional de expertos para ver quién tenía razón”, explica Mayorga Castañeda.

Ese panel falló a favor de México: 3 de las 14 plagas que había detectado Senasica en la papa estadounidense eran de importancia cuarentenaria, es decir, había un riesgo grave.

“El secretario Vilsack no lo aceptó, hizo un berrinche, se salió y nos dejó plantados en su oficina al embajador Sarukhán, al doctor Enrique Sánchez Cruz, director de Senasica, y a mí. [….] Pero la presión siguió. En 2012 se firmaron esos documentos donde se establecía el protocolo para atenuar los riesgos sanitarios, que incluía la trazabilidad de los embarques, que vengan de plantas certificadas, que sea para consumo, que venga envasada en botes de 9 kilogramos con una sustancia que impida la germinación, de manera que no se pueda usar para semilla porque la desactiva, y que además fuera en igualdad de condiciones, es decir, que México pudiera exportar también. Eso se acordó en la reunión de Los Cabos y ese es todavía el camino”, dijo el exsecretario de Agricultura.

Mayorga Castañeda recuerda que cuando Estados Unidos empezó a presionar para abrir el mercado de la papa “coincidió con la solicitud de Jalisco de exportar aguacate. La postura de Vilsack fue detener la aprobación hasta que no se resolviera el tema de la papa. Ken Salazar y su hermano John encabezaban ese lobby”.

Los americanos “querían eso a como diera lugar y en algún momento le plantearon al gobierno mexicano un trueque: ‘Oye, tú me permites exportar papa fresca y yo permito que Jalisco pueda exportar aguacate directamente a Estados Unidos’. Ese trueque se dio dentro de la administración del presidente Peña Nieto, pero hubo amparos muy fuertes de productores de papa mexicanos, y de productores de otros productos que veían la amenaza sanitaria, y varios jueces determinaron que no se podía. La batalla legal sigue, aunque ese trueque diplomáticamente u oficialmente ya se dio”, dijo Mayorga Castañeda.

Los inconvenientes

Los productores de papa no están satisfechos con la postura de la Corte de México para allanar el camino y dejar la decisión en Senasica decidir. Ante la evolución de los hechos, han optado por trabajar con las autoridades para crear un marco eficiente de regulación que proteja a la producción nacional.

No es solamente la papa nativa la que está expuesta al riesgo; las plagas cuarentenarias detectadas podrían tener efectos nocivos sobre cultivos de maíz, de jitomate, de berenjena o tabaco.

“El pasado mes de junio, Senasica y la Conpapa acordaron poner en marcha una estrategia conjunta para constatar el cumplimiento del Plan de Trabajo de Importación de Papa estadounidense a México y con ello evitar riesgos fitosanitarios para la producción nacional del tubérculo. Entre las medidas que llevarán a cabo de manera coordinada se encuentra la vigilancia de los embarques en la frontera, con el fin de verificar que estén debidamente identificados para garantizar la trazabilidad del producto. Lo anterior se dio a conocer en una reunión que sostuvieron el director en jefe del organismo de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, Francisco Javier Trujillo Arriaga, y el presidente de la Conpapa, Gerardo García Menaut”, dijo la secretaria de Agricultura y Desarrollo Rural de Jalisco, Ana Lucía Camacho Sevilla.

Es justamente este estado el que está en el ojo del tema porque la moneda de cambio por la papa fueron las exportaciones de aguacate, palta o avocado que se generan en su territorio, con 56,000 hectáreas dedicadas a la producción de Persea americana, pero además, con una importante producción de papa.

A escala nacional hay 8,700 productores de diversos tamaños. Hasta el pasado 15 de mayo, la papa fresca estadounidense solo podía comercializarse en una franja de 26 kilómetros de la frontera. El 15 de mayo se recibió el primer embarque.

Gerardo García Menaut sostiene que Senasica no cuenta con la infraestructura y el personal para vigilar el cumplimiento del protocolo. También destaca que los certificados de sanidad que anexa la autoridad del país vecino no son confiables, pues “muchos cargamentos con certificado de estar libres de plagas en realidad sí la contienen”.

Los miembros de Conpapa trabajan horas extra para ayudar a Senasica a vigilar los embarques que ingresan y su manejo en destinos, donde no deben venderse a granel. Esto ha generado importantes decomisos.

En el mundo se produjeron 359 millones de toneladas de papa en 2022. Solamente 3.2% de la producción se comercializa en el mercado internacional. Esto demuestra la prudencia de los países a recibir papa foránea por los riesgos sanitarios.

Por si fuera poco, México es autosuficiente en producción de papa, con muchas ventajas sobre su socio comercial: 24 estados la producen a lo largo del año, mientras que la producción de Estados Unidos se concentra en sólo tres meses, por lo que el producto que desean exportar suele ser refrigerado.

Desde hace 78 años no entra un embarque de papa mexicano a Estados Unidos, a pretexto de una plaga, subraya el presidente de Conpapa.

La preocupación se centra en fortalecer a Senasica, que por la “austeridad republicana” no tiene la capacidad de inspección que el tema requiere. En contraste, “ellos [los estadounidenses] tienen más recursos para vigilar”.

El dirigente empresarial identifica los intereses de la familia Salazar, de Colorado, ligados a la producción de papa. “Ellos usaron el aguacate como moneda de cambio. […] Llegaban amigos aguacateros conmigo y me decían: ‘Ya fírmale, ya queremos mandar nuestros aguacates allá’. Pero no es fácil, hay mucho en juego y por eso exigimos que se fortalezca en capacidad técnica y humana al Senasica, o se tendrán problemas serios en la agricultura del país”, advirtió García Menaut.

* Agustín del Castillo es periodista especializado en temas ambientales y vida rural. Ha publicado los libros Montañas de Jalisco (2003), La Primavera en llamas (2006) y Arterias de Vida. Los ríos de Occidente (2007). En 2021 coordinó el libro Periodismo y derechos humanos en Jalisco, el desafío autoritario.

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