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Existe una carencia de líderes preparados: Roos-Olsson
Victoria Roos-Olsson dijo que es necesario que los líderes ejecutivos vean el panorama tanto de corto plazo, como de largo plazo en cuanto a las estrategias, la fuerza laboral, los clientes e incluso, la comunidad.
Victoria Roos-Olsson participó en World Business Forum; Super Minds, organizado por WOBI. Foto EE: Cortesía Twitter @wobi_es
El principal reto que enfrentan las empresas es que no tienen líderes listos para dirigir a su equipo de trabajo, así lo considera Victoria Roos-Olsson, durante su participación en World Business Forum; Super Minds, organizado por WOBI.
“Según diversas estadísticas internacionales, sólo el 30% de los empleados se involucran en las corporaciones, y el resto no muestra un verdadero interés por la empresa en la que laboran”, mencionó Victoria Roos-Olsson, quien lleva tres décadas de carrera profesional a la aplicación práctica de los principios de la investigación del liderazgo y del desarrollo de la gestión, la productividad personal, la lealtad del cliente y la mejora del desempeño organizacional.
En su ponencia, Roos-Olsson dijo que es necesario que los líderes ejecutivos vean el panorama tanto de corto plazo, como de largo plazo en cuanto a las estrategias, la fuerza laboral, los clientes e incluso, la comunidad.
“Los líderes de primer nivel son los mensajeros de la cultura dentro de la organización”, dijo Victoria Roos-Olsson.
La especialista compartió las prácticas críticas para liderar un equipo y dar fortaleza a la corporación:
- Desarrollar el esquema mental del líder: Explorar los cambios fundamentales de esquemas mentales que maximizan su éxito como líder de otras personas.
- Llevar a cabo reuniones individuales regularmente: Incrementar el involucramiento de los miembros del equipo sosteniendo regularmente reuniones individuales que profundicen su entendimiento sobre los asuntos de los miembros del equipo, y los ayuden a solucionar los problemas por sí mismos.
- Estructurar su equipo para obtener resultados: Generar claridad sobre las metas y los resultados del equipo; delegar responsabilidad a los miembros del equipo mientras se les provee el nivel correcto de apoyo.
- Crear una cultura de retroalimentación: Dar retroalimentación para desarrollar la confianza y la competencia de los miembros del equipo; mejorar su desempeño buscando retroalimentación por parte de otras personas.
- Guiar a su equipo a través del cambio: Identificar acciones específicas para ayudar a los miembros del equipo a navegar y acelerar a través del cambio y a alcanzar un mejor desempeño.
- Administrar su tiempo y su energía: Utilizar la planeación para enfocarse en las prioridades más importantes, y fortalecer su capacidad de ser un líder eficiente por medio de administrar también su energía.
patricia.ortega@eleconomista.mx
kg