Investigación a GasAtacama revela sobrecosto por 260 mdd

Hasta 260 millones de dólares de sobre costo para todo el sistema eléctrico del Norte Grande en Chile, incluyendo a generadoras y clientes libres, habría provocado la operación de la central GasAtacama en los últimos cuatro años.

Así lo señala una estimación realizada por el CDEC-SING, organismo que coordina la operación de las eléctricas en el norte, a petición de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC), en el marco de la investigación que lleva adelante contra la generadora propiedad de Endesa por supuestas vulneraciones a los parámetros de mínimo técnico de operación y tiempo estimado de la misma.

En el último trimestre del 2015, una auditoría del CDEC determinó que los parámetros de operación informados por al generadora superaban ampliamente los óptimos técnicos, por lo que la entidad ofició a Endesa para que los adecuara, lo que la firma realizó a fines de noviembre.

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En resumen, Endesa había informado que la central necesitaba la menos 30 horas de operación continua -y otro tiempo similar para ser puesta en marcha- para funcionar de manera óptima, mientras que la auditoría determinó que este lapso no debía ser de más de dos horas.

En el caso del mínimo técnico de operación, esto es, la potencia a la que la unidad puede funcionar sin dañarse, Endesa había informado que esta era de 310 MW, mientras que la auditoría determinó que valores 30% por debajo de esto.

El efecto de esta sobreestimación habría sido que se desplazaron unidades más baratas de generación del sistema, lo que supuestamente habría provocado perjuicios a otros actores, entre ellos generadoras y grandes consumidores, como las mineras y otras industrias intensivas en uso de energía. El exceso de costos se habría dado entre el 2011 y el 2015, según el CDEC-SING.

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En el caso de los clientes regulados, entre ellos hogares, comercios y pequeñas y medianas empresas, estas no se habrían visto afectadas, pues los precios que pagan están determinados por contratos licitados.

La SEC inició una investigación solicitando más antecedentes.

Eléctricas en la mira

Endesa no es la única generadora que está en la mira de la SEC. El organismo estaría recabando datos del resto de los operadores para determinar si otras empresas incurrieron en las mismas prácticas durante el periodo analizado. Entre ellas están AES Gener y E-CL, los dos otros actores de mayor importancia en el Norte Grande.

Si bien la investigación está en su fase inicial -la SEC aún no habría oficiado a las empresas para que expliquen su accionar-, las firmas se exponen a multas de hasta 10 mil UTA, unos 7.5 millones de dólares, hasta la paralización de las centrales, en caso de ser sancionadas.

Una fuente conocedora del sector sostiene que el problema que afecta a la generadora de Endesa se extiende a todas las unidades térmicas que operan en el Norte Grande, y tiene que ver con que los criterios de seguridad y flexibilidad que se adoptaron durante la crisis del gas natural no serían compatibles con la realidad actual del sistema, que tiene una holgura de capacidad y donde las Energías Renovables no Convencionales (ERNC) -que requieren mayor flexibilidad para su operación- cada día toman un rol más preponderante.

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El contexto en que estas unidades operan hoy es muy distinto. Durante la crisis se privilegió la seguridad del sistema y la continuidad del suministro, y si esto no se hacía, nos exponíamos a un blackout. Además, en esa época no existía ni un solo megawatt de ERNC instalado , señala la fuente.

Sostiene que si las unidades térmicas operan por debajo de ciertas especificaciones, se vuelven más ineficientes, inestables y contaminantes, por lo que la gestión del parque a carbón, gas o diésel se hace mucho más difícil con la existencia de las unidades eólicas o solares que hoy existen en el norte.

El tema iría más allá, pues la situación también se daría en el SIC, aunque una auditoría realizada a la central Gualcolda de AES Gener no reveló las mismas diferencias.

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