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Licitaciones darán mayor acceso a 3G

Para el 2011 o el 2012, los usuarios mexicanos podrán aumentar el potencial de sus celulares y aparatos móviles con la llegada de nuevos competidores al mercado.

Gracias a las nuevas licitaciones que aprobó la Cofetel en los últimos días, los mexicanos podrán tener mayores posibilidades de contratar servicios avanzados para sus dispositivos móviles. Sin embargo, se trata de una promesa a largo plazo.

Todavía nos falta esperar hasta el 2011 o el 2012 para detectar los beneficios , explicó Evelyn Pineda, analista de Select.

¿De qué servicios se trata? De los de Tercera Generación o 3G, que hacen posible accesar a Internet a alta velocidad, ver TV en tiempo real en aparatos móviles o explotar al máximo los servicios del GPS, entre un largo etcétera.

Estos servicios, aunque ya se venden en México siguen siendo privilegio de unos cuantos, pues sólo América Móvil y Iusacell pueden ofrecerlos hasta ahora a precios todavía muy altos. Por ello, la promesa es que a través de Televisa-Nextel (que con las licitaciones aumentó su espectro 140%) y Telefónica (que lo aumentó 56.8%) existan más opciones 3G para más usuarios.

Pero no sucederá de inmediato. Los operadores ganadores tienen todavía que levantar nuevas inversiones, decidir qué tipo de tecnología usarán, atraer a más fabricantes que les ofrezcan equipos más sofisticados, entre otros trámites , indicó Pineda de Select.

Cálculos de IDC México aseguran que la demanda de soluciones móviles empresariales pasará de 427 millones de dólares en el 2009 a 518 millones de dólares para el 2010, en donde las aplicaciones de videoconferencia y telepresencia crecerán por arriba de 30 por ciento.

Lo que no sucederá

Estas licitaciones no contemplan dos aspectos: la baja en los precios de servicios 3G y el incremento de usuarios para los operadores.

Cuando hay más competidores en un mercado sí se pueden reducir los precios, pero no se reducen los costos. Es decir, que la inversión en infraestructura 3G sigue siendo elevada para los operadores, lo que no les permitirá bajar demasiado los precios en los servicios que ofrezcan , explicó Pineda.

Para Felipe González, de la consultora Valorem, especializada en telecomunicaciones, tampoco se generará un mayor nivel de penetración de usuarios.

El mercado celular mexicano ya tiene un nivel de penetración muy alto: unos 80 millones de teléfonos, por lo que ya estamos en el terreno de la saturación , aseguró.

Esto significa, según explicó, que en adelante el crecimiento para los operadores va a ser por rutas muy rudas: venderle a la gente un segundo o tercer teléfono, arrebatarle clientes a la competencia o vender líneas que sean sólo para aparatos especializados (localización antirrobo de autos, medidores de luz, entre otras).

Si en cinco años tienen 15% más del mercado, me parecerá mucho. Ésta fue una de las razones por las que a ningún operador internacional le interesó entrar a las licitaciones , dijo González.

La promesa del 3G

Los servicios de Tercera Generación (3G) podrán estar al alcance de más usuarios mexicanos gracias a las nuevas licitaciones.

Se venderán en el país dispositivos más sofisticados. No sólo se trata de celulares, también de computadoras portátiles (notebooks y netbooks), lectores como el iPad y Kindle, entre otros.

Con estos aparatos 3G, los usuarios podrán conectarse a Internet de alta velocidad de manera automática sin una conexión WiFi.

Además de los servicios de telefonía móvil tradicional (llamadas telefónicas) podrán disfrutar de otras aplicaciones más sofisticadas, como las videollamadas.

También se permitirá la descarga de programas y aplicaciones de la web desde cualquier lugar.

Ofrecerán aplicaciones atractivas: servicios de TV en un aparato portátil, radiolocalización GPS más avanzada y más facilidades técnicas para hacer comercio electrónico y usar servicios financieros.

Al tener más 3G en México, se sientan las bases técnicas para adoptar tecnologías más sofisticadas en el mediano plazo, como el 4G (que ya está probando Telefónica).

Fuente: El Economista con datos de Select.

nacosta@eleconomista.com.mx

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