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México buscaría medidas espejo en acero y aluminio con EU

Se aceptarían cupos de exportación, si son simétricos, dice Jesús Seade, de la SRE, aunque la Secretaría de Economía sostuvo que el país rechazaría toda forma de comercio administrado.

México aceptaría restringir cuantitativamente el comercio de acero con Estados Unidos, siempre y cuando se establezcan límites equivalentes en uno y otro país.

En la primera fase de negociación, Estados Unidos aceptó reconocer los niveles máximos de exportaciones mexicanas de acero y propuso un cupo en ese sentido, pero supeditado a que México no podría exportar nada por encima de ese límite, aun pagando el arancel de 25%, lo que fue rechazado por el entonces secretario de Economía, Ildefonso Guajardo.

En un segundo intento, Estados Unidos pidió que México le diera una excepción de 200,000 toneladas de acero plano, a lo que México respondió que estaba de acuerdo, a condición de que se le otorgara, a su vez, una excepción para exportar libre de arancel una cantidad similar a la planta de tubos de Ternium en Texas, a lo cual se rehusó el representante comercial de la Casa Blanca, Robert Lighthizer. La posición actual es que México prefiere el libre comercio, pero estaría dispuesto a aceptar un cupo a sus exportaciones de acero a Estados Unidos, si se establece otro cupo en sentido contrario, afirmó Jesús Seade, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Seade dijo que México preferiría no reemplazar los aranceles con un cupo de importación, pero está abierto a discutir esa posibilidad, siempre y cuando el cupo esté por encima de los niveles históricos de comercio y Estados Unidos también lo acepte.

Este caso comenzó cuando Estados Unidos anunció el 8 de marzo que fijaría aranceles globales de 25% a las importaciones de acero y de 10% a las de aluminio, argumentando preocupaciones de seguridad nacional, y otorgó exenciones a 34 países, las cuales mantuvo a cambio de límites a través de cupos para los casos de Brasil, Argentina, Corea del Sur y Australia, mientras que las extendió sólo hasta el 1 de junio para México, Canadá y las 28 naciones de la Unión Europea. Inicialmente, estas tarifas entraron en vigor el 23 de marzo.

“Cualquier noción de un cupo debe ser realmente equilibrada”, añadió Seade al medio estadounidense Politico.

Sin embargo, pese a lo planteado por Jesús Seade, Luz María de la Mora, subsecretaria de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía, expresó este lunes que México no aceptará cuotas de exportación en acero y aluminio. Ante los integrantes de la American Chamber México, la funcionaria advirtió que el gobierno mexicano rechaza el comercio administrado, pues va en contra de lo negociado en el El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

Durante la celebración de su 102 Asamblea General de Socios de las empresas estadounidenses establecidas en México, De la Mora expresó que “el acero es un insumo que usan muchas industrias. Entonces lo que conviene es eliminar esa tarifa y no conviene entrar en comercio administrado”.

En el 2018, México registró exportaciones de productos monitoreados de acero a Estados Unidos por 3 millones 442,000 toneladas, un aumento interanual de 9.1 por ciento.

La lista comprende cinco grupos de productos de acerías agregadas: planos, largos, tubos, semiacabados y productos de acero inoxidable.

El T-MEC no resolvió ni abordó los aranceles de la Sección 232 sobre las exportaciones de acero y aluminio de Canadá y México hacia su vecino común.

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