Padecen los constructores estragos de la deuda en estados

Constructoras de algunos estados del país resienten la falta de obras y recursos, debido a las deudas heredadas de anteriores administraciones, como es el caso de Coahuila, Nayarit y Chiapas.

Esta situación mantiene al sector estancado o al borde de la quiebra, aseguran líderes locales de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).

La semana pasada, el presidente de la CMIC, Luis Zárate, declaró que son al menos 2,000 las constructoras que están al borde de la quiebra, debido a las deudas que enfrentan tanto con municipios como con gobiernos estatales.

Sin detallar dónde se encontraba la mayoría de estas empresas, aseguró que ya han habido avances importantes en varios estados por saldar sus cuentas con el sector.

Así, en Coahuila la actividad cayó en el 2012 en 30%, ante la falta de recursos para realizar obras; en Nayarit aún hay empresarios a los cuales se les debe dinero desde hace un año; y en Chiapas, después de mantenerse estancados los pagos durante el último año y ocasionar repetidas protestas de la Iniciatica Privada local, fuentes consultadas aseguran que los constructores llegaron a un acuerdo con el gobierno actual.

Cabe destacar que del 2006 al 2012, la deuda en Coahuila aumentó en 8,571.8%; en Zacatecas 2,362.6%; en Chiapas 1,761.5%; en Tamaulipas 1,295.3%; y en Nayarit 1,053.5%, los cinco avances más significativos para ese lapso, de acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda, lo cual compromete las finanzas estatales.

NAYARIT, AÚN CON ADEUDOS DE HACE UN AÑO

Jesús Miramontes Lara, presidente de la CMIC en Nayarit, comenta que, en general, el 2012 fue un buen año para la construcción en su estado, con un crecimiento de alrededor de 30 por ciento.

Asegura que, aunque el tema de la deuda no ha provocado el cierre de empresas, el tema sí les ha afectado, toda vez que al inicio de la administración del gobernador Roberto Sandoval, en septiembre del 2011, se le debía a la industria alrededor de 600 millones de pesos por obra pública. A la fecha, dice que ese pasivo ronda 50%, con todavía 20 empresas esperando su pago.

Lo hemos estado sorteando. Tenemos el pleno conocimiento de que la administración presente está haciendo todo lo necesario para solventar lo que ahorita requiere nuestra economía.

La administración ha buscado apoyos que le permitan estar realizando obra pública, pero sobre todo, sí han tomado de forma institucional los compromisos heredados de la obra , dice.

Y continúa: Yo he platicado con compañeros de otros estados donde encuentran una puerta cerrada y no hay una certidumbre de pago. Aquí sí las tenemos .

EN COAHUILA, ABATIDOS POR DOS FRENTES

En entrevista, Tomás Galván Camacho, presidente de la CMIC, delegación Laguna, asegura que la actividad de la construcción del lado coahuilense ha ido cayendo año con año, particularmente durante el 2012, cuando registró una variación negativa de 30% respecto del 2011.

A esto, él añade el factor de la inseguridad, el cual se ha convertido en el pan de cada día de los empresarios de la construcción, mismo que tampoco ayuda a captar mayor inversión por parte de la Iniciativa Privada.

De acuerdo con la delegación de la CMIC en Coahuila, desde hace dos años la industria ha estado preocupada por la inminente quiebra de empresas, con la pérdida de empleos que esto conlleva. Manifestó que el origen de la crisis por la que atraviesan los constructores de Coahuila se debe a la falta de pagos del Ejecutivo estatal, por obras realizadas desde la administración del Gobernador Humberto Moreira, y que no han encontrado una solución con el actual mandatario.

Galván Camacho asegura que la inversión en infraestructura en Coahuila, particularmente en Torreón, está detenida, con calles en mal estado y falta de mantenimiento a las vías principales.

EN ZACATECAS, SIN AFECTACIONES

Por su parte, Héctor Ramírez Ibarra, presidente de la CMIC Zacatecas, asegura que el crecimiento de la deuda estatal no impactó al empresariado de la construcción, por el contrario, la inversión pública en obra aumentó.

En el 2011, los afiliados a la CMIC en el estado ejercieron obra por alrededor de 900 millones y se generaron 3,000 empleos; mientras que en el 2012 la derrama alcanzó los 1,400 millones junto con 4,000 empleos directos generados. Alrededor de 70% de estas inversiones corrió por cuenta del estado, refiere.

El Economista solicitó saber de manera insistente la situación de las delegaciones de la CMIC en los estados de Chiapas y Tamaulipas, sin obtener una respuesta oficial.

erick.ramírez@eleconomista.mx