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Gdl arranca periodo de vacaciones con marchas
El periodo vacacional de verano en Guadalajara inicia con los inconvenientes que provocan las marchas diarias de ejidatarios de El Zapote por la carretera Guadalajara-Chapala hacia el aeropuerto internacional de la ciudad.
Guadalajara, Jal. El periodo vacacional de verano en Guadalajara inicia con los inconvenientes que provocan las marchas diarias de ejidatarios de El Zapote por la carretera Guadalajara-Chapala hacia el aeropuerto internacional de la ciudad.
El ejido El Zapote va a hacer lo que esté de su parte, lo que sea; vamos a seguir con las marchas y no nos vamos a quedar así , advirtió Nicolás Vega Pedroza, presidente del comisariado ejidal, pese a que el director del Centro Jalisco de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Salvador Fernández, aseguró la semana pasada que la dependencia daba por concluido el litigio con los comuneros y que no pagaría un centavo más.
No obstante, los ejidatarios emprendieron por tercera semana consecutiva las marchas por la carretera, en perjuicio de los usuarios de la terminal aérea que aumenta la movilización con motivo de las vacaciones.
Mientras comuneros y la SCT siguen sin ponerse de acuerdo en torno al pago de las 307 hectáreas expropiadas al ejido El Zapote superficie sobre la cual se encuentra asentado el aeropuerto tapatío , los usuarios de la terminal han quedado en medio del conflicto, pues se les dificulta acceder a ésta.
De acuerdo con estadísticas del Grupo Aeroportuario del Pacífico, durante julio del 2016, cuando inició el periodo vacacional de verano del año pasado, el aeropuerto tapatío movilizó 1.1 millones de viajeros; es decir, 14% más pasajeros que los movilizados en el mes de junio, antes de las vacaciones.
Al respecto, el coordinador del Consejo de Cámaras Industriales de Jalisco, Daniel Curiel, ha solicitado a los ejidatarios que permitan el libre tránsito de los usuarios de la terminal aérea y aseguró que al bloquear el acceso del aeropuerto durante sus marchas cometen un delito .
Sin embargo, los comuneros aseguran que no dejarán las movilizaciones ni la batalla legal hasta lograr que la SCT pague un precio justo por las tierras expropiadas que, de acuerdo con los avalúos solicitados por ellos mismos, asciende a casi 3,000 millones de pesos.