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Conoce Florence, la prisión "del infierno" donde "El Chapo” podría llegar
"Infierno de alta tecnología", "Alcatraz rocoso", "SuperMax": son algunos de los sobrenombres de la cárcel a la que podría ser enviado el narcotraficante Joaquín "Chapo" Guzmán, considerada una de las más seguras y crueles de los Estados Unidos.
“El Chapo” fue declarado culpable por un jurado de Nueva York de delitos de narcotráfico, posesión de armas y lavado de dinero y en junio debe ser sentenciado a una cadena perpetua y probablemente enviado a esta prisión de máxima seguridad en Florence, Colorado.
Construida en 1994 en el corazón de un desierto montañoso, de esta instalación rodeada de torres de vigilancia y seguridad fuertemente armada es prácticamente imposible escapar, incluso para “El Chapo”, que en el pasado se fugó de prisiones de máxima seguridad en México en dos ocasiones.
De Florence nadie ha escapado. “El Chapo” se unirá allí a otros narcotraficantes, pero también a presos condenados por terrorismo.
Los prisioneros más peligrosos están confinados 22 horas y media al día en una celda de hormigón y acero, de la que sólo pueden salir con grilletes en pies y manos. La celda cuenta con una cama, un escritorio, un banco de concreto, una ducha, inodoro y lavamanos de acero inoxidable.
Las celdas tienen una puerta de acero sellada, por lo que los reclusos no pueden hablar entre ellos. El único contacto humano es con las pocas palabras que intercambian con los guardias, cuando traen y se llevan la comida.
El único momento para ver la luz del sol es en los minutos de "recreación". Tres o cinco guardias llevan al recluso en cadenas a una especie de jaula, no mucho más grande que la celda, donde finalmente puede ver el cielo y hablar, si coinciden, con otros presos en jaulas vecinas. En la celda la luz del día pasa por un agujero profundo de 10 centímetros de ancho a 120 centímetros de altura, que impide ver hacia el exterior.
Las visitas están permitidas, pero tienen que ser aprobadas por la cárcel. Según los abogados de ”El Chapo”, su esposa Emma Coronel no será autorizada a verlo.
Las condiciones de esta cárcel serán mejores para “El Chapo” a las que ha tenido en la de Manhattan donde ha estado recluido por dos años.
En un principio estaría, como los reclusos más peligrosos, en el casi total aislamiento de casi 23 horas al día, pero sus condiciones pueden mejorar gradualmente con buena conducta.