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Disturbios en Inglaterra llegan a Liverpool
La violencia y el saqueo que afectan a varias partes de Gran Bretaña se extendieron a la ciudad de Liverpool, informó la policía británica.
Londres. SAQUEOS E incendios envuelven franjas de la ciudad, mientras la ola de disturbios civiles ha crecido considerablemente y se ha apoderado de esta masiva capital.
Las imágenes de violencia -jóvenes saqueando tiendas, incendiando negocios locales y enfrentándose a la policía en al menos seis vecindarios- han impactado profundamente a los londinenses, al provocarle a esta legendaria ciudad un terrible golpe a menos de un año de que arranquen las Olimpiadas.
Los alborotadores atacaron autobuses de dos pisos y provocaron un incendio que cubrió toda una calle en el vecindario sureño de Croydon.
La generalizada molestia, la cual se difundió en su mayoría a través de redes sociales, comenzó a gestarse en los explosivos barrios bajos, la mayoría de ellos alejada del icónico centro de Londres plagado de turistas extranjeros. Sin embargo, un grupo de agitadores atacó un conjunto de tiendas en Birminham, la segunda ciudad más grande de Gran Bretaña.
La violencia, la cual inició en Tottenham debido a la muerte de un residente por parte de la policía, desencadenó un efecto dominó entre jóvenes marginados en otras partes de la ciudad. El exalcalde Ken Livingstone comentó que los disturbios avivaron un resentimiento acumulado debido al desempleo y a los cortes presupuestarios para las comunidades pobres y asociaciones de beneficencia.
Por otro lado, el gobierno de coalición británico denunció que los disturbios no son más que una ola extraordinaria de criminalidad oportunista, ya que los implicados en los actos vandálicos de las últimas 48 horas no han mostrado señas de hacer una declaración política.
Hackney -un vecindario cercano al nuevo parque olímpico- se convirtió también en sede de los alborotos. Una línea de policías acordonó una arteria comercial que había sido tomada por saqueadores enmascarados, quienes rompieron ventanas y robaron indiscriminadamente.
Funcionarios comentaron que se desplegaron agentes adicionales a las calles para hacerle frente a los alborotadores; sin embargo, su pasividad -imágenes de televisión muestran a los efectivos observando a la distancia mientras los saqueadores se escapaban con mercancías- dio lugar a fuertes críticas de algunos sectores. Las autoridades declararon haber detenido a 215 personas y consignado a otras 25.