Israelíes despiden al expresidente Shimon Peres

Jerusalén. CIENTOS DE israelíes presentaron sus respetos el jueves al noveno presidente de Israel, Shimon Peres, durante la capilla ardiente organizada ante el Parlamento. Entre los primeros en acudir estaban el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el presidente del país, Reuven Rivlin.

Peres murió el miércoles por complicaciones derivadas de un derrame cerebral. Tenía 93 años.

Estaba previsto que decenas de líderes mundiales acudieran el viernes al funeral de Estado en Jerusalén, como el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, Bill Clinton o el presidente de Francia, François Hollande. Se esperaba que fuera la reunión más grande de su clase desde el funeral del primer ministro Yitzhak Rabin, asesinado por un nacionalista judío en 1995.

Bill Clinton llegó a Israel el jueves por la mañana en un avión privado del magnate israelí-estadounidense Haim Saban, según un portavoz de la autoridad aeroportuaria de Israel. Saban es un importante donante del Partido Demócrata y de la campaña a la presidencia de Hillary Clinton.

Bill Clinton acudió directamente al Parlamento, donde rindió guardia por un momento frente el ataúd de Peres que fue envuelto con una bandera israelí. El féretro también era visto por los israelíes que hacían fila para pasar junto a él.

Clinton era presidente de Estados Unidos cuando Peres ayudó a negociar un histórico acuerdo provisional de paz con los palestinos en 1993. Al año siguiente, Peres recibió el Nobel de la Paz junto con el primer ministro israelí, Yitzhak Rabin, y el líder palestino Yasser Arafat.

Bill y Hillary Clinton han dicho que perdieron a un auténtico y apreciado amigo en Peres.

Barack Obama también aterrizó más tarde en Israel para asistir al funeral. La delegación de Estados Unidos también incluía al secretario de Estado, John F. Kerry; a la asesora de Seguridad Nacional, Susan E. Rice, y una docena de miembros del Congreso, así como líderes de la comunidad judía de Estados Unidos.

Netanyahu y Rivlin colocaron una ofrenda floral junto al ataúd por la mañana.

Una ausencia perceptible en el funeral será la de los líderes árabes.

Peres fue elogiado en Occidente como un hombre de paz, pero los líderes del mundo árabe han recibido la noticia de su muerte, principalmente con silencio.

La hostilidad está relacionada con el papel de Peres en la creación del arsenal militar israelí, su apoyo a los asentamientos en Cisjordania y una guerra en Líbano.

Aun así, el presidente palestino, Mahmud Abás, alabó a Peres por alcanzar una paz de los valientes con Arafat y Rabin.

Un asesor del rey de Marruecos asistirá al funeral, según el Ministerio israelí de Exteriores.

Peres sirvió dos veces como primer ministro de Israel. Durante sus siete décadas de carrera, pasó de ser un halcón a ganar el Nobel de la Paz por sus esfuerzos de reconciliación con los palestinos. Como presidente del país despertó admiración por su jovial optimismo.