Lectura 3:00 min
Kosovo reabre el principal paso fronterizo con Serbia, aliviando así el bloqueo
La Unión Europea y Estados Unidos han estado presionando a Kosovo y Serbia para que den un paso atrás en un creciente enfrentamiento que llevó a Belgrado a poner a su ejército en máxima alerta de combate.
Kosovo reabrió el jueves su mayor paso fronterizo con Serbia, horas después de que los serbios que protestaban en el norte del país prometieran retirar los controles de carreteras, aliviando así un aumento de las tensiones que ha alarmado a las potencias mundiales.
Tanto la Unión Europea como Estados Unidos han estado presionando a Kosovo y Serbia para que den un paso atrás en un creciente enfrentamiento que llevó a Belgrado a poner a su ejército en máxima alerta de combate.
Los serbios del norte de Kosovo, que llevan levantando barricadas desde el 10 de diciembre en protesta por la detención de un expolicía serbio -el último de una larga serie de puntos conflictivos-, acordaron empezar a retirarlas después de que fue trasladado a arresto domiciliario.
Muchas de las barricadas parecían seguir en pie el jueves por la mañana, aunque las autoridades indicaron que el proceso podría llevar algún tiempo.
La tensión seguía siendo elevada. Dos camiones calcinados llenos de grava permanecían en un puente cercano a la ciudad de Mitrovica, dividida étnicamente, a unos 50 kilómetros del paso fronterizo reabierto de Merdare. La policía de Kosovo dijo que estaba investigando un incendio provocado.
Alrededor de 50,000 serbios que viven en el norte de Kosovo se niegan a reconocer al gobierno de Pristina o el estatuto de Kosovo como país separado. Cuentan con el apoyo de muchos serbios de Serbia y de su gobierno.
Kosovo, de mayoría albanesa, declaró su independencia con el respaldo de Occidente tras la guerra de 1998-1999, en la que la OTAN intervino para proteger a los ciudadanos de etnia albanesa.
La policía kosovar informó de que había reabierto el paso fronterizo de Merdare -el más importante para el transporte de mercancías por carretera que une este estado sin salida al mar con los países de Europa Occidental- después de que se retiraron las barricadas en el lado serbio de la frontera.
Otros dos pasos fronterizos con Serbia en el norte de Kosovo permanecen cerrados desde el 10 de diciembre.
Kosovo ha sido durante mucho tiempo una fuente de tensiones entre Occidente, que respaldó su independencia, y Rusia, que apoya a Serbia en sus esfuerzos por bloquear el ingreso de Kosovo en organizaciones mundiales como Naciones Unidas.
El Kremlin rechazó el miércoles las acusaciones del ministro del Interior kosovar de que Rusia estaba influyendo en Serbia para desestabilizar Kosovo, afirmando que Belgrado defiende los derechos de los serbios étnicos.