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Anticipan cimientos más fuertes para Fibras en el resto del año
Entre enero y junio de este año los ingresos de los 16 fideicomisos de inversión en bienes raíces que integran el sector,crecieron 19.45% en conjunto, llegando a una cifra de 29,804.89 millones de pesos.
Los cimientos de los fideicomisos de inversión en bienes raíces (fibras) se están reforzando, por lo que se espera un desempeño operativo más fuerte en lo que resta del año, tras reportar cifras positivas en el primer semestre, aun cuando las condiciones son difíciles por el aumento en la tasa de interés de referencia y la inflación que no cede.
Entre enero y junio, los ingresos de los 16 fibras que integran el sector, crecieron 19.45% en conjunto, a 29,804.89 millones de pesos; los fondos de operación (FFO) aumentaron 16.05%, a 12,017 millones de pesos y la ocupación fue de 91.70%, en promedio, menor al 93.02% de los mismos meses del 2021, sin considerar al segmento hotelero.
Analistas explicaron que los reportes positivos de los fibras, particularmente en el segundo trimestre del año, se refleja en su cotización en la Bolsa Mexicana de Valores, la cual muestra también una tendencia de recuperación.
En términos generales, los fundamentales de los fibras son buenos y su desempeño en el mercado ha mejorado aún con aumentos en la tasa de interés”, dijo Eduardo López, analista en Banco Ve Por Más (Bx+).
Durante el año, el índice S&P/BMV FIBRAS ha recortado pérdidas y gana 0.06%, contrario al desempeño del S&P/BMV, que cae 8.70 por ciento. Solo en este segundo semestre el índice de fibras gana 5.36% y 2.34% el S&P/BMV IPC.
Los fideicomisos ganadores en Bolsa en este 2022 son FibraHotel, cuyo precio del certificado bursátil fiduciario inmobiliario (CBFI) gana 47.37%, seguido de Nova que avanza 20.04%; el tercer fibra con mejor retorno es el hotelero Inn, con 14.65% y Educa en el cuarto, con 8.08 por ciento.
Especialistas explicaron que en el segundo semestre se anticipan “perspectivas más sólidas” porque los fibras prácticamente ya no tienen necesidad de otorgar diferimientos o descuentos en las rentas, las cuales aplicaron en la pandemia para apoyar a sus inquilinos; la movilidad social está beneficiando el tráfico en los centros comerciales.
“En lo operativo, los fibras lucen bien, pero hay que estar atentos en los resultados financieros por el efecto del aumento en la tasa de interés y en las rentas”, dijo Armando Rodríguez, director general de Signum Research.
Industrial, a la cabeza
El directivo opinó que, por los resultados de enero a junio, todo indica que los fibras terminarán el año “muy bien”, aunado a su capacidad para aumentar las rentas conforme la inflación y su resiliencia por el aumento en los intereses.
Por sectores, el industrial mantiene una ocupación de 97.3%, en promedio. Sin embargo, en mercados fronterizos, como Tijuana y Chihuahua, alcanza hasta 100%, lo que se traduce en incrementos en rentas. Además, las tarifas se cobran en dólares y los contratos están ligados a la inflación.
El comercial tiende a recuperarse por el aumento de la movilidad y el hotelero mejora sus ganancias, pero oficinas, sigue rezagado.
“El industrial es un sector que tiene una perspectiva positiva a mediano plazo. La demanda está impulsada por el reacomodo de empresas que buscan reubicar su producción más cerca de Estados Unidos, donde México tiene ventajas naturales por su posición geográfica y por el tratado de libre comercio. Destaca el buen momento del segmento logístico, derivado del crecimiento del comercio electrónico”, puntualizó Eduardo López.
En el segmento comercial la ocupación se ha estabilizado, abundó, con niveles superiores al 90%, aunque antes de la pandemia las tasas promediaron alrededor de 93.5 por ciento.
“Los bienes raíces comerciales están recuperando piso por la mayor movilidad de las personas en los centros comerciales y el consumo. Además, los descuentos o diferimientos en las rentas de los inquilinos prácticamente se han eliminado, ayudando a la recuperación en sus ingresos”, agregó.
En tanto, los bienes raíces hoteleros, explicó Armando Rodríguez, están recuperando la ocupación, por lo que sus ingresos y ganancias han mejorado.
En el caso de Fibra Inn y Fibra Hotel, la ocupación de los hoteles que operan cerró en junio en niveles de 62.50 y 74.70%, respectivamente, contra la tasa de 57.90 y 62.50% registrada en los primeros seis meses de 2019 (el año previo a la pandemia).
También reportan ganancias netas por 158 millones de pesos para el primer caso y de 403.8 millones de pesos para el segundo en los primeros seis meses del año, después de un 2020 y 2021 complicados por los cierres de las unidades debido a la crisis sanitaria.
El segmento de oficinas continúa con perspectivas débiles, con tasas de ocupación de 70%, antes de la pandemia reportaban niveles de 85 por ciento. Por ello, prevén todavía presiones en ingresos por rentas ante el regreso paulatino en los corporativos.
“Los fibras que operan edificios de oficinas aun no muestran una recuperación generalizada. Algunos, como Fibra Uno están buscando reconvertir estos espacios a segmentos como hospitales o vivienda”, añadió Armando Rodríguez.