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Elevan presión sobre la libra
Los bajistas redoblan su ofensiva contra la libra, con la divisa británica a un paso de perder de nuevo la barrera de los 1.30 dólares.
La reunión del Banco de Inglaterra del pasado jueves y el informe oficial de empleo de EU publicado el viernes desinflaron de nuevo la cotización de la libra, justo cuando la divisa británica cotizaba cerca de sus máximos desde el Brexit.
La libra se sitúa ahora a un paso de perder la barrera de los 1.3 dólares. La pérdida de este nivel dejaría a la divisa británica a un paso de sus mínimos de más de tres décadas, los 1.2798 dólares que alcanzó el pasado 6 de julio, con la conmoción por el triunfo del Brexit aún reciente.
Los últimos movimientos de los bajistas no descartan la caída a nuevos mínimos desde 1985. Según los datos del pasado viernes de la Commodity Futures Trdaing Commission, las posiciones cortas en las libras alcanzaban récords históricos. Nunca antes los bajistas se habían posicionado con tanta determinación en la libra.
El pasado jueves el Banco de Inglaterra no sólo rebajó los tipos de interés a nuevos mínimos históricos, desde el 0,5% hasta el 0,25%. Avanzó además su predisposición a bajar de nuevo los tipos, y puso en marcha un programa de compra de activos por el que 'imprimirá' hasta 70.000 millones de libras.
El Banco de Inglaterra trata así de ahuyentar la amenaza de la recesión en Reino Unido, aflorada a raíz del triunfo del Brexit. Los últimos datos macro han acentuado los síntomas de contracción en la economía británica.
Entre los datos macro más esperados de la semana en los mercados internacionales figuran las cifras que se conocerán mañana en Reino Unido, y que servirán de nuevo para evaluar el pinchazo de la economía británica. La agenda de mañana incluye la publicación de la balanza comercial y de la producción industrial en junio. Las previsiones de los analistas auguran un repunte de sólo el 0,1% en la producción industrial de Reino Unido.
Por el contrario, las últimas cifras procedentes del mercado laboral de Estados Unidos reflejan un renovado impulso. La creación de empleo del mes de julio pulverizó todas las previsiones y ha reavivado el debate sobre una eventual subida de tipos de la Fed antes de final de año.
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