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Fondos de infraestructura esperan inversiones por US150,000 millones

México y Brasil son los países de América Latina con el mayor potencial de inversión en infraestructura.

México y Brasil son los países de América Latina con el mayor potencial de inversión en infraestructura.

Incluso, con la reforma energética se estima que entre ambos países lograrán captar entre 150,000 y 170,000 millones de dólares anuales, estimó Jorge Kogan, ejecutivo senior de Análisis y Programación Sectorial del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).

En entrevista, el especialista insistió en que hay un creciente interés de los fondos de infraestructura por invertir en México, sin embargo, todavía se requieren resolver algunos temas legales.

En la actualidad, los recursos privados que se destinan a América Latina para infraestructura -sector energético, telecomunicaciones, transporte, así como agua y saneamiento-, ascienden a entre 150,000 y 200,000 millones de dólares y de éstos, de 75,000 a 100,000 millones de dólares se dirigen a Brasil y México.

El especialista reconoció que a pesar del interés de los capitales, la infraestructura es un tema complejo.

Si bien es cierto que los capitales tienen la mira y estudian a América Latina, se mantienen cautelosos .

En el caso de México, dijo, se anunció el Programa Nacional de Infraestructura, el que si bien es ambicioso, se necesitan los marcos regulatorios y que los fondos se sientan cómodos de llegar al país .

Reconoció que hay bajo nivel de inversión en infraestructura en América Latina, ya que para este rubro se destina entre 2.5 y 3% del Producto Interno Bruto (PIB) de la región, en tanto que los países del sureste asiático canalizan entre 6 y 8% del PIB.

romina.roman@eleconomista.mx

Capital privado, la clave

Kogan agregó que los gobiernos sólo pueden aumentar su inversión en alrededor de 30% de la cifra actual, pero eso es una pequeña fracción de lo que se requiere y si no hay recursos privados, la brecha con otras regiones no se podrá reducir y el atraso será mayor .

En consecuencia, agregó, la vía para destinar más recursos son los fondos de capital privados, ya que hasta hace unos años, una parte de las necesidades se cubrían en su mayoría con financiamiento de la banca comercial.

Sin embargo, explicó, con la entrada en vigor de los acuerdos de Basilea III, la participación de la banca se empezó a reducir por los riesgos de largo plazo y en consecuencia, los fondos son los que deberán cubrir ese espacio.

Hay fondos de capital con mucho dinero que buscan en dónde invertir (...) y la infraestructura es uno de los sectores con el mayor potencial .

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