Lectura 5:00 min
GISSA incrementa su participación en el sector automotriz
Son pocas las compañías en Bolsa que se enfocan en el sector automotriz, tales como Nemak, Rassini o incluso Quálitas.
Son pocas las compañías en Bolsa que se enfocan en el sector automotriz, tales como Nemak, Rassini o incluso Quálitas. Grupo Industrial Saltillo (GISSA) está dentro de este mercado, pero su baja bursatilidad y capitalización la han puesto fuera del enfoque del inversionista, por lo que, aun cuando el sector ha sido fuertemente castigado después de las elecciones en Estados Unidos, la acción de GISSA mostró la menor caída con respecto a sus comparables mexicanas, con un precio mínimo de 33.16 pesos (-12% desde el 8 de noviembre)
El pasado miércoles, GISSA informó sobre un acuerdo para adquirir Grupo Infun, empresa dedicada a la producción, diseño y maquinado de componentes para la industria automotriz, cuya sede se encuentra en Barcelona, España, y que además tiene operaciones en Italia y China. Infun atiende a armadoras como Ford, Renault, Fiat, GM, Daimler y Volvo. Tras dicho anuncio, la acción mostró un repunte de 7.8% en el día.
¿A qué se atribuyó dicho repunte? Es una pregunta lógica dadas las perspectivas de la industria automotriz y empresas exportadoras en general, pero consideramos que existen varias razones por las que la adquisición genera alto valor para la compañía. Además, hablamos con la emisora para un mejor entendimiento de la transacción.
En primer lugar, es una de las adquisiciones más importantes que ha hecho el Grupo en el segmento de autopartes (recordemos que la empresa participa en tres segmentos de negocio, el segundo más importante es construcción). La transacción será por 280 millones de euros, para comprar una empresa que durante el 2015 generó ingresos por 207 millones de euros, esto es, cerca del 40% de las ventas consolidadas de GISSA, que financiará la transacción con caja propia (hasta 60 millones de dólares) y deuda bancaria (hasta $326.6 millones de dólares). Por lo anterior, el segmento de autopartes pasaría de representar 46% de los ingresos consolidados a 58%. Además, resaltamos que dicho segmento no sólo es el de mayores márgenes, sino de mayores ingresos en moneda extranjera, por lo que podríamos observar mejores márgenes consolidados.
En segundo lugar, la compra de Infun también permitirá incrementar la diversificación geográfica, acrecentando la participación en regiones que aún muestran un crecimiento atractivo en el sector automotriz, como China y Europa, en donde podríamos ver tasas de crecimiento promedio para los próximos cuatro años de 3% y 5%, respectivamente, a diferencia de Estados Unidos, donde se espera una tasa cercana a 1%. Además, resaltamos que no se trata de un proyecto greenfield y que también permitirá generar sinergias operativas y comerciales
En este sentido, destacamos que, antes de la transacción, el segmento de autopartes generaba 60% de sus ingresos en la región NAFTA (33% de los ingresos consolidados eran exportación hacia Estados Unidos) y el restante en Europa. Sin embargo, después de la adquisición, la proporción de ingresos por región podría invertirse, por lo que Europa generaría 60% de los ingresos del segmento (25% sería exportación a Estados Unidos).
Además de la diversificación geográfica, la adquisición permitirá la diversificación en monedas, pues mientras previo a la adquisición los ingresos se distribuían 40% dólares, 40% pesos y 20% euros, la composición podría normalizarse a 35% dólares, 35% euros y 30% pesos, disminuyendo la exposición a la volatilidad cambiara del peso contra el dólar y realzando los crecimientos en pesos.
Otro punto importante es que la afectación en balance por el incremento en deuda no sería sustancial, pues de hecho, la deuda neta/EBITDA actual es 0x. La administración nos comentó que en un escenario proforma, el endeudamiento podría incrementarse a no más de 2.8x deuda/EBITDA (actual 1.17x). Además, aun cuando el compromiso para la adquisición sería en dólares y los ingresos que percibe Infun son en euros, la administración se siente cómoda con su generación actual en dólares para hacer frente al incremento en deuda, aunque no descartarían tomar algunas coberturas si fuera necesario.
Finalmente, comentamos las perspectivas ante el efecto Trump. Se nos informó que la depreciación del peso frente al dólar beneficia temporalmente los márgenes, gracias a que los ingresos son mayores que los costos dolarizados. Con la adquisición de Infun la relación cambiaria se podría mantener, pues sus operaciones son en gran parte en euros. También comentamos sobre la afectación que podría tener la terminación del TLC, y aunque sí sería significativa, coincide con el resto de las autoparteras en que el principal afectado sería el consumidor y que la pérdida sería sumamente grande para ambas partes (México y Estados Unidos), por lo que se sigue asignando baja probabilidad al escenario. Además, con la reciente adquisición, como ya comentamos, GISSA está disminuyendo su exposición relativa al mercado estadounidense.
En conclusión, creemos que la transacción en Europa hace mucho sentido estratégico para GISSA y reduce su exposición al mercado estadounidense. Destacamos que tenemos una recomendación de compra para la emisora.
*Armelia Reyes es analista bursátil en Signum Research.