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Estímulo fiscal extra, ruta correcta: gasolineros
El gobierno mexicano encontró una buena solución para seguir conteniendo el alza al precio de las gasolinas y evitar el perjuicio a los consumidores.
Es el punto de vista del gremio gasolinero más importante en México, la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo), encabezada por Roberto Díaz de León.
Sin embargo también invita a la cautela.
Habrá que estar pendientes a la evolución de su aplicación y a varios indicadores básicos: inflación, tipo de cambio y precio de referencia.
Y al mismo tiempo el gobierno mexicano tendrá que observar minuciosamente la balanza comercial, específicamente el balance entre las exportaciones petroleras y las importaciones de gasolina.
Pero en términos generales, el anuncio va en el sentido correcto, dicen. El viernes pasado el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O. anunció un estímulo adicional a las gasolinas y el diésel para evitar que aumente el precio de ese energético en términos reales.
El que se venía aplicando ya era insuficiente. Su cobertura alcanzó el 100% para la gasolina regular y el diésel y el 97% para la gasolina premium.
En virtud de ese mecanismo, hasta ahora, el precio real de la gasolina para el mercado local, se mantiene artificialmente bajo, en un nivel que ronda los 21.16 pesos por litro. Sin los estímulos al IEPS que aplica la Secretaría de Hacienda, sería de alrededor de 27 pesos por litro para el consumidor final.
Y las proyecciones de la Onexpo, es que en breve alcanzará un precio real de 30 pesos por litro.
Los recientes aumentos a los precios de referencia que llevaron al barril del WTI a 139.13 dólares y la mezcla mexicana de exportación a 115 dólares por barril se reflejaron en incrementos del 40% para la gasolina regular y la premium y de 56% para el diésel.
Del 1 de enero al 7 de marzo de 2022, el precio de la gasolina regular pasó de 20.55 a 21.16 pesos por litro con lo que ha tenido un incremento de 61 centavos por litro, equivalentes al 2.9% en lo que va del año.
Por eso, el estímulo adicional al IEPS de las gasolinas y al diésel, dicen los gasolineros, permitirá mantener el objetivo original, contener el precio de las gasolinas.
Aunque el estímulo adicional será neutro para las propias empresas expendedoras de gasolina.
Se aplicará en un nivel superior de la cadena de suministro del combustible. Lo recibirán los productores Pemex y los importadores de gasolina.
Los expendedores de gasolina, no tendrán el beneficio directo de la acreditación del IEPS contra el Impuesto Sobre la Renta y el Impuesto al Valor Agregado.
Exactamente como venía ocurriendo con la primera parte de los estímulos, el impacto del alza de los precios internacionales se suaviza en el mercado local a través de las empresas productoras de Pemex y las importadoras.
Sin embargo las gasolineras del país, asegura Díaz de León continuarán con su política de auto contención de los márgenes de utilidad.
La Onexpo confía en que con el nuevo estímulo fiscal se podrá mantener los precios de las gasolinas y el diésel por debajo de la inflación.
El titular de las finanzas públicas dijo el viernes pasado que los ingresos y egresos por venta de petróleo y compra de gasolina son prácticamente un espejo. Se compensan unos con otros.
Son una cobertura natural, aseguró.
Lo que no se sabe es qué ocurrirá en un escenario extremo y prolongado.Por otra parte, la intención de evitar el impacto inflacionario por el alza al precio de las gasolinas en México, se está cumpliendo con el sacrificio fiscal que implica dejar de cobrar el IPES a las gasolinas y a partir de que se necesite, con las inyecciones de recursos que realice el gobierno para cubrir ISR e IVA a productores e importadores. Tales recursos fiscales podrían destinarse a satisfacer otras necesidades sociales. En cambio se destina a un beneficio generalizado, no focalizado.
Nadie sabe cuándo terminará el conflicto bélico, y los efectos económicos de la guerra comercial ya están amenazando al mundo con vientos de estancamiento e inflación.