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Gasto de gobierno vs inflación
Los pronósticos de recesión en 2023 fallaron tanto para EU como para México, ambos países habrían crecido de manera importante. Es buena noticia empero la inflación sigue alta sin señales claras de que esté francamente controlada. Como consecuencia, las tasas de interés se mantienen altas pese a las presiones de gobiernos, mercados y acreditados de crédito.
Si bien la recesión no llegó, la inflación ha persistido tanto EU como México quienes cerraron con aumentos en el índice, en particular, en los componentes subyacentes que son los que debieran estar estabilizados desde hace tiempo, pues los efectos del Covid-19, confinamientos y los que se quieran incorporar ya no son determinantes por más que los analistas quisiéramos dar otras explicaciones.
El tema de la inflación nos preocupa por su impacto en el régimen de las tasas de interés, el costo del dinero y la deuda tanto del gobierno como de los particulares, no obstante, la mayor preocupación es el impacto en lo inmediato en lo que se conoce como microeconomía, es decir, el costo de los bienes y servicios directos que consumen las personas.
En el caso de México los datos recientes reflejan incrementos en los alimentos en los que destacan en porcentajes: cebolla (82), chile poblano (63), tomate verde (57), zanahoria (50), azúcar (40), papaya (35), nopales (26), chayote (26), frijol (20), limón y ejotes (18) y, plátano, guayaba y galletas saladas (13). Todas estos incrementos extremadamente por arriba de la meta de inflación de Banxico de 4 por ciento.
Por tanto, asistimos a la natural tensión que existe entre la necesidad de los mercados, deudores y gobiernos con la necesidad de los consumidores para que sus ingresos alcancen a cubrir cosas tan elementales como el limón o nopales. Los primeros desean que las tasas de interés disminuyan para estimular la salida de dinero de los bancos para ser invertidos en los mercados accionarios buscando mayores rendimientos al tiempo que, los gobiernos y deudores, obtendrían un respiro en las amortizaciones de sus créditos. Enfrente, las familias absorben incrementos en bienes sensibles.
El actual gobierno del presidente López Obrador ha hecho el esfuerzo para incrementar los salarios mínimos lo que representa uno de sus principales logros con impacto en la economía real pese a ello, el esfuerzo puede ser fácilmente diluido en caso de que persistan precios altos. Paradójicamente el gasto de gobierno sí es excesivo e incluso deficitario, contribuye negativamente para que los precios bajen.
No cabe duda de que estamos ante una tensión entre el gasto gubernamental y el freno a la inflación que se envuelve en el interés que ambos extremos tienen, por lo pronto el nivel de precios, tasas de interés y tipo de cambio serán variables que estará jugando un papel importante el resto del año a la espera de que los salarios reales no se vean afectados.