Kamala Harris romperá la época electoral en México y clarificará la relación

Kamala Harris siente admiración por la diosa hindú Kali, una guerrera mitológica que protege a los inocentes frente al mal.

El 10 de enero de 2017, tras seis días en el cargo como senadora, Kamala Harris interrogó a John Kelly durante la sesión de ratificación como secretario de Seguridad Nacional del presidente Trump.

Harris le preguntó a Kelly si llevaría a cabo los planes de Trump de construir un muro, deportar a miles de personas y aumentar el número de celdas de detención en todo el país. A Kelly se le resecó la garganta. “¿Y está de acuerdo en que muchos de esos jóvenes (refiriéndose a los dreamers protegidos por el programa DACA) llegaron aquí de niños y que el único hogar que conocen es Estados Unidos?

-“Muchos de ellos entran en esa categoría, respondió Kelly.

-“¿Y está de acuerdo en que ahora estudian en las universidades de nuestro país, que algunos trabajan en compañías de la lista Fortune 100?

-“Me consta que algunos lo hacen, sí”, dijo Kelly.

-“¿Y pretende usar los limitados recursos ejecutivos del Departamento de Seguridad Nacional para sacarlos del país?”, cuestiona Harris.

-“Actuaré de acuerdo con la ley”, respondió Kelly (Kamala Harris, Dan Morain, Roca Editorial, 2021).

La senadora Harris se guardó su veredicto sobre Kelly hasta nueve días más tarde, cuando publicó una nota diciendo que votaría en contra: “Desgraciadamente, no puedo mirar a los dreamers a la cara y darles ninguna garantía de que el general John Kelly no los deportará (...) Por motivos éticos y morales, tenemos que cumplir la promesa hecha a estos niños por el Gobierno de Estados Unidos”.

Harris valora el sentido de la palabra, la respeta. En 2003 contendió por la fiscalía del distrito de San Francisco y a sus votantes les prometió que nunca estaría a favor de la pena de muerte. Tres meses después de ganar el puesto, en 2004, un sujeto asesinó al policía encubierto Isaac Espinoza. El sindicato de la policía que la había apoyado durante su campaña manifestó su desacuerdo con la visión de Harris. Espinoza continúa en la cárcel.

En ese año, 2004, la hoy vicepresidenta de Estados Unidos apoyó a un profesor de derecho constitucional de la Universidad de Chicago, que también trabajaba en un pequeño bufete de abogados, y que deseaba competir por un escaño en Illinois. Se llamaba Barack Obama.

“No hay un Estados Unidos liberal y un Estados Unidos conservador. Lo que hay son Estados Unidos de América. No hay un Estados Unidos negro, un Estados Unidos blanco, un Estados Unidos latino y un Estados Unidos asiático. Lo que hay son Estados Unidos de América”, comentó Obama durante la Convención Demócrata Nacional de 2004. Harris siempre estuvo de acuerdo con su visión social sin fronteras, y decidió apoyarlo recaudando fondos para su candidatura.

Doce años después Trump ganaría las elecciones a través de un discurso divisorio.

Joe Biden no olvida el apoyo que recibió su hijo Beau durante su enfermedad por parte de Kamala Harris. Beau fue fiscal general de Delaware. “Hubo épocas, mientras aguantaba la tormenta (de algún caso), en que Beau y yo hablábamos varias veces al día”, comenta Harris en el libro que Dan Morain escribe sobre ella.

Harris buscó el apoyo de Joe Biden durante su campaña para ir al Senado en 2016. En febrero de ese año, Biden aceptó y viajó a San José, California. Durante una hora, Biden habló sobre lo que aportaría Harris a la política como senadora. “El problema no es nuestro pueblo. El problema es nuestra política, que se ha vuelto mezquina, personal, rabiosa, fea”. Lo que no sabía Biden es que Trump llegaría a la Casa Blanca.

Kamala Harris ha recibido la encomienda de llevar la relación con México. Conoce sus problemas. Su palabra clarificará la relación bilateral.

@faustopretelin