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Sector bancario de EU: Radiografía del tercer trimestre de 2023
En un análisis del desempeño financiero del sector, se revela que la utilidad neta alcanzó los 68,393 mdd en el periodo, reflejando una disminución del 4.6% en comparación con el mismo trimestre del 2022
La Corporación Federal de Seguros de Depósito (FDIC, por sus siglas en inglés) acaba de lanzar uno de los informes más trascendentales a nivel mundial, abarcando los resultados financieros de 4,614 bancos comerciales e instituciones de ahorro. Este informe anual proporciona una visión integral de la salud financiera del sector bancario y sirve como referencia crucial.
Según las más recientes cifras publicadas, la suma total de activos del sector bancario estadounidense ascendió a 23.40 billones de dólares, mostrando una ligera disminución del 0.9% en comparación con el mismo período del año anterior.
De manera destacada, un 42.66% de esta cifra se concentra en los cuatro gigantes bancarios: JP Morgan Chase, Bank of America, Citigroup y Wells Fargo.
En un análisis del desempeño financiero del sector, se revela que la utilidad neta alcanzó los 68,393 millones de dólares en el último trimestre, reflejando una disminución del 4.6% en comparación con el mismo período del año anterior.
A pesar de esta contracción trimestral, el panorama cambia cuando se observan los resultados acumulados de los últimos 9 meses, donde la utilidad total ascendió a 218,636 millones de dólares, experimentando un notable aumento del 11.7% en comparación interanual.
Un elemento clave destacado en el informe financiero es la significativa alza del 33.2% interanual en las provisiones para pérdidas crediticias. Este aumento, en gran medida, se atribuye a la implementación de la norma contable ASU 2016-13, la cual abarca las provisiones para pérdidas crediticias en base consolidada para aquellas entidades que ya la adoptaron y para aquellas que no, esta partida representa la provisión para pérdidas por préstamos y arrendamientos
Cabe señalar que algunas entidades financieras aún no han adoptado completamente esta norma, generando variaciones más pronunciadas en las cifras reportadas agregadas.
El Margen de Interés Neto (MIN) concluyó el trimestre con un 3.30%, presentando una variación interanual significativa de 14 puntos base (p.b.). Esta notable diferencia se atribuye principalmente al impacto del incremento de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal, marcando un hito distintivo en la evolución del rendimiento financiero.
Otra de las cifras que destacaron en el reporte fueron los gastos operativos totales, los cuales alcanzaron 140,916 millones de dólares, creciendo únicamente 1.5% en un año, producto de un alza en los gastos salariales y de prestaciones.
Por otro lado, los ingresos distintos a intereses se ajustaron en 3.5%, resultado de una ganancia no recurrente derivada de la adquisición de un importante banco en quiebra durante el trimestre anterior.
Por séptimo trimestre consecutivo, el sistema bancario enfrenta pérdidas no realizadas en inversiones agregadas, evidenciando una disminución en el valor de mercado de sus activos. Las pérdidas acumuladas ascienden a una cifra significativa de 558,400 millones de dólares.
Dentro de la cartera de inversiones del sector se incluyen acciones, bonos y otros instrumentos financieros. Este fenómeno subraya la complejidad de la gestión de activos en un entorno de mercado dinámico.
La cartera de crédito total alcanzó la cifra de 12.34 billones de dólares, experimentando un aumento del 0.37% con respecto al trimestre anterior. Este crecimiento se atribuye principalmente a saldos más elevados en tarjetas de crédito, otros préstamos y arrendamientos.
Por otro lado, la cartera vencida ascendió a 101,516 millones de dólares, resultando en un índice de morosidad del 0.82 por ciento. Se observa un leve incremento de 7 puntos básicos en comparación con el trimestre precedente.
Un aspecto para destacar en el informe es el aumento en el número de bancos que figuran en la "Lista de Bancos en Problemas" de la FDIC, alcanzando un total de 44 instituciones financieras. La suma de los activos de estos bancos asciende a 53,500 millones de dólares, señalando un incremento significativo en la preocupación por la salud financiera de ciertos actores en el sector.
Para el sector bancario, de cara al 2024, se prevén cambios significativos, especialmente con un posible recorte en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal hacia la segunda mitad del año. Este ajuste podría estimular la demanda de préstamos al reducir los costos de endeudamiento.
No obstante, también podría presionar los márgenes netos de interés al disminuir los rendimientos de los activos financieros.
Las instituciones bancarias necesitarán ajustar ágilmente sus modelos de negocio y estrategias de inversión para adaptarse a este nuevo entorno, lo que podría traducirse en una disminución gradual de los resultados agregados del sector a medida que la normalización monetaria empiece a materializarse.