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Política

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AMLO confirma que llegó a un acuerdo con Grupo México sobre ocupación ferroviaria

En mandatario consideró como “buenos” para las dos partes los términos; hace unos días ya había declarado que no se contemplaba el pago en efectivo de alguna indemnización.

Se terminó el diferendo entre Grupo México y el Gobierno de la 4T. El Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo este miércoles, en Tampico, Tamaulipas, que ya se llegó a un buen arreglo con el grupo liderado por Germán Larrea para resolver la situación sobre las vías de Ferrosur ocupadas el 19 de mayo por la Secretaría de Marina (Semar), en Veracruz.

Los detalles, prometió, se podrán conocer en su conferencia del 1 de junio.

De acuerdo a lo declarado por él la semana pasada, los titulares de las secretarías de Gobernación y Marina estaban al frente de la negociación y no se contemplaba el pago en efectivo de alguna indemnización, a pesar de los 9,500 millones de pesos que pretendía recibir Grupo México como indemnización.

Como parte de su gira de trabajo, el mandatario señaló a reporteros que ya hubo un arreglo, pero que no tenía claro si ya se había firmado.

“Hasta donde vi los términos del acuerdo considero que son buenos para las dos partes. Se llegó a un buen arreglo, pero falta todavía que se tenga el documento firmado”, dijo sentado en una camioneta entre gritos de apoyo y reclamos, mientras llegaba al hospital general Carlos Canseco.

Trece días tuvieron que pasar para encontrar la opción más viable para evitar un largo conflicto legal entre las partes que pudiese complicar la funcionalidad del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), toda vez que Ferrosur tiene la concesión de los tramos ferroviarios que acceden al puerto de Coatzacoalcos, en donde la carga petroquímica es el principal negocio.

Ampliar periodos en concesión

Una de las opciones viables en la negociación es la ampliación del periodo de exclusividad (30 años originalmente) que tiene Ferrosur en su título de concesión con vigencia de 50 años, el cual fue otorgado por la ahora Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).

Un hecho relevante de la ocupación actual de las vías es que se plantea un periodo de cinco años y que si luego de ese periodo la autoridad no justifica el acto, la empresa estará en condiciones de pedir la devolución de la vía.

Lo anterior puede ocurrir en el 2028, año en el que subsidiaria de Grupo México perdería el derecho de exclusividad actual de sus vías y otras firmas se podrían subir a la vía pagando los respectivos derechos de paso.

La ampliación no sería ajena y tendría como fundamento la Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario y su reglamento, como ha ocurrido antes en otra concesión a una empresa del grupo: Ferromex.

Esa empresa que tiene la operación de 8,130 km de vías (Ferrosur tiene 1,824) ya tuvo dos modificaciones a su título de concesión a cuenta de la construcción del libramiento ferroviario de Celaya, la primera en el 2017 y la segunda en el 2021, por lo cual sus 30 años originales de exclusividad pasaron a 40 en la actual administración federal.

También es necesario destacar que durante el actual gobierno las ferroviarias no han pasado por su mejor momento y el año pasado, en la Directriz de emergencia para el bienestar de los usuarios del servicio, con la que se pretendía abatir la inflación se mencionó:

Las tarifas máximas registradas se encuentran hasta 83% por encima de la inflación acumulada. Para algunos productos básicos, como el maíz, se tienen tarifas muy elevadas, derivado del poder de monopolio de los concesionarios, con el consecuente impacto en la economía de las familias. Se estima que el precio del kilo de tortilla, es aproximadamente un peso más caro, debido a los elevados costos y restricciones en el servicio de transporte de maíz.

empresas@eleconomista.mx

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