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Política

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Dudan que escuelas resistan un terremoto

Si un terremoto como el del 19 de septiembre de 1985 se repitiera en estos momentos, la infraestructura educativa pública en la capital estaría en riesgo, pues sus estructuras no soportarían un sismo mayor a 8 grados en la Escala de Richter.

Si un terremoto como el del 19 de septiembre de 1985 se repitiera en estos momentos, la infraestructura educativa pública en la capital estaría en riesgo, pues sus estructuras no soportarían un sismo mayor a 8 grados en la Escala de Richter.

A decir de Carlos Sáinz, titular del Instituto de la Infraestructura Física Educativa del Distrito Federal (IIFEDF), sería muy aventurado garantizar que ante un sismo como el de 1985, en el cual oficialmente murieron 10,000 personas, la infraestructura escolar pudiera salir bien librada; las nuevas construcciones sí soportarían un evento de esta naturaleza.

Te puedo asegurar que la mayor parte de las estructuras, más de 60% de ellas, soportaría un sismo de 7 grados, pero nadie puede garantizar el de 8 , advirtió.

De acuerdo con Sáinz, en el Distrito Federal hay 8,500 escuelas, la mayoría de sus estructuras tiene más de 60 años de vida. En 1985, 1,500 centros educativos sufrieron daños.

Actualmente, 10 escuelas están cerradas porque no cumplen con los estándares de seguridad, pero el funcionario no descartó que aumente el número cuando el Instituto comience la certificación.

Respecto del tema de prevención, Sáinz lamentó que se haya diluido la conciencia de la prevención. También algunos padres de familia se mostraron preocupados, pues aseguran que sus hijos no están lo suficientemente capacitados.

Magdalena López Herbert, madre de una niña de quinto grado de primaria, dijo que le preocupa que su hija no pueda reaccionar de forma adecuada, pues no son constantes los simulacros, además de que los nervios siempre hacen que se limite la capacidad de reacción.

No corro, no grito y no empujo, pero a veces me echo a correr , mencionó Édgar García Isol, de la primaria República de Venezuela.

No hacen simulacros. Es lo que vamos a ver con las autoridades educativas. No me siento tranquila , manifestó Argelia López, madre de un menor de tercer año de la escuela primaria Licenciado Carlos Zapata Vela.

Carlos Sáinz, titular del Instituto creado en noviembre pasado, informó que, además, se firmó un acuerdo con el Inapam, para que adultos mayores formen parte de un grupo de detección temprana de daños si hubiera un temblor de alta magnitud, pues, aseguró, con su experiencia tienen mejor capacidad de respuesta para salvaguardar la integridad de los niños y generar una evaluación temprana de los daños.

Aseguró que para hoy estarán instaladas las alertas sísmicas en todas las escuelas de la capital del país, aunque advirtió: Yo puedo tener el mejor sistema de alerta, pero si no sé cómo actuar, no sirve de nada .

EN CASO DE TEMBLOR

PROPONEN TUBO VERTICAL PARA EVACUACIÓN

Debido al riesgo de que la ciudad de México sea sacudida por un movimiento telúrico de una magnitud similar a la de hace 26 años, diversos especialistas reconocieron la necesidad de que se realicen simulacros de evacuación en la capital.

Sin embargo, en estos ejercicios no se evalúan situaciones reales de riesgo, como cuando las salidas de emergencia se colapsan o cuando el pánico hace presa de la gente, advirtieron.

Ambas situaciones son sumamente comunes, indicó el presidente de Código y Comunicaciones y Servicios, Federico Mendoza Mirassou, quien planteó como solución que se coloquen los tubos verticales en edificios de dependencias federales y aun en inmuebles de la Iniciativa Privada, para salvaguardar la vida de quienes trabajan en ellos y de la gente que acude a algún servicio.

En rueda de prensa, Mendoza refirió que este sistema soporta temperaturas hasta de 2,580 grados Celsius, cubre alturas de edificios de hasta 120 metros y se ha instalado en 4,000 recintos en el mundo, incluyendo seis inmuebles de esta ciudad.

El especialista de esa empresa especializada en protección civil explicó que el Tubo de Evacuación Vertical Axel Thoms tiene tres años de operación en nuestro país y permite la salida de ocho a 10 personas por minuto en caso de emergencia.

Al arrojarse por el dispositivo, que está diseñado para el desalojo rápido de embarazadas, personas con discapacidad y de la tercera edad principalmente, un ser humano puede alcanzar una velocidad de 2 metros por segundo.

Agregó que el sistema de evacuación -que tiene más de 30 años en el mercado mundial- es de fácil instalación, ya que se coloca junto a una ventana, balcón o azotea, y tiene 15 años de garantía. (Con información de Notimex)

vmacias@eleconomista.com.mx

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