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Homicidio y robo, focos rojos que heredarán en el Estado de México
Actual administración deja alza de 103.3% en número de carpetas por violación.
Un robo en una sucursal de Banorte dej� como saldo un cliente muerto. La polic�a se�al� que se dos presuntos criminales fueron los autores de este crimen.
Los delitos de homicidio doloso, secuestro; violación, en cualquiera de sus modalidades; lesiones dolosas y los robos totales son los focos rojos en materia delictiva que deja la actual administración al próximo gobierno mexiquense que podría encabezar tanto Delfina Gómez como Alejandra del Moral.
Según cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), si se comparan los primeros cinco años completos del gobernador Eruviel Ávila, con las cifras de Alfredo del Mazo, el homicidio doloso pasó de 7,672 carpetas de investigación a 11,932 es decir un aumento de 55.5 por ciento.
Mientras que el secuestro pasó de 660 carpetas de investigación iniciadas a 757 en la actual administración.
Por su parte, la cantidad de carpetas de investigación por violaciones –que incluyen la modalidad de simples y equiparada– han sido más del doble con Alfredo del Mazo al frente de la gubernatura; ya que de 6,082 se incrementó a 12,369, un alza de 103.3 por ciento.
Las lesiones dolosas pasaron de 147,166 carpetas, entre 2012 y 2016, a 234,261 acumuladas entre 2018 y el año pasado, lo que significó 59.18% más.
Los robos en la entidad es otro de los delitos acrecentados en los últimos años, ya que las 738,056 carpetas registradas, contrastan con las 462,805 (59.47% menos) de los primeros cinco años completos de Eruviel Ávila al frente de la entidad.
Para el delito de feminicidio entre 2016 y agosto de 2017 (último año y ocho meses de la administración de Eruviel Ávila) hubo 688 casos de este delito en la entidad, mientras que con Alfredo del Mazo se han registrado 840 feminicidios.
Propuestas en materia
El aumento en varios delitos de la entidad, durante los últimos años, hacen relevante un análisis de las propuestas que Alejandra del Moral y Delfina Gómez, candidatas para la gubernatura de la entidad, dieran a conocer en su momento.
La candidata de Morena, en su plataforma electoral propone una estrategia de seguridad con la misma línea a nivel federal; mientras que en las del Partido del Trabajo y Partido Verde Ecologista de México existen propuestas locales como transformar a las fiscalías especializadas en ciudadanas, coordinación efectiva entre diversas instituciones, organizaciones civiles y víctimas de crímenes para reducir la violencia de género, entre otras acciones.
En el caso de Va por el Estado de México, las propuestas son bullets genéricos como fomentar una cultura de paz, prevenir violencia y delincuencia, diseñar una estrategia global de seguridad; aunque no detallan a profundidad las acciones a realizar para lograrlo.
Edgar Baltazar, director de investigación y políticas públicas de Mexicanos Unidos Contra la Delincuencia, afirmó que “en el papel, los diagnósticos son malos y son propuestas muy insuficientes”.
El especialista denunció que “estamos ante partidos políticos que, en sus documentos de las plataformas, no tienen un mapeo claro, un diagnóstico contundente sobre la grave situación de inseguridad del Estado de México, que es el primer lugar en varios delitos, éste no está suficientemente destacado en las plataformas, con excepción quizá del Partido Verde”.
Por su parte, Cristina Dorantes, profesora e investigadora de la Facultad de Derecho, de la Universidad Autónoma del Estado de México, consideró que “ninguna de las dos (candidatas) atiende las características de la dependencia que se va a encargar de la seguridad, es decir, esta Secretaría de Seguridad”.
Por otro lado, la experta indicó que, más allá de las promesas que ambas hacen a la población, cualquiera que logre el triunfo deberá realizar “una reingeniería en materia de seguridad, (la triunfadora) debe de implementar lo que ha funcionado en otros países de América Latina que han tenido casos de violencia extrema y que es compartir las buenas prácticas no documentadas en relación a la seguridad ciudadana”.