La Operación Limpieza: de prófugos, a liberados

La Operación Limpieza de la Procuraduría General de la República (PGR), que involucró a 25 personas, inició en enero del 2008, lo que significó pedir la renuncia al extinto José Luis Santiago Vasconcelos, un exfuncionario que estuvo en las entrañas de lo que era la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).

Los anuncios fueron oficiales. Se nombró a Noé Ramírez Mandujano, quien era uno de los fiscales confiables de Santiago Vasconcelos, quien tenía en ese tiempo los mejores carteles de las Sedena y Semar, y estadounidenses como la DEA o el FBI. Fue enviado por el expresidente Felipe Calderón a difundir en EU la nueva reforma de justicia penal, que no logró implementar, al morir en el avionazo donde falleció el exsecretario de Gobernación.

Los primeros involucrados en una RED, así lo indicaron la PGR y la entonces SIEDO, hoy Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), fueron Fernando Rivera Hernández y Miguel Ángel Colorado González. Ahí detonó todo. Fueron capturados, no divulgados quienes eran funcionarios públicos en funciones y el único que sigue prófugo de la justicia es José Antonio Cueto López; las cabezas de esa investigación están libres, desde Noé Ramírez Mandujano, exonerado el martes, quien era el principal acusado, según la PGR. La Operación Limpieza sólo se enderezó contra funcionarios de la SIEDO, en la administración de la primera mujer que llegó a ser Procuradora de la República en más de 100 años, Marisela Morales Ibáñez. Esta investigación la llevó a ocupar el cargo y junto con sus fiscales mandó a prisión a 25 personas, de acuerdo con la indagatoria anterior.

Los que siguen enfrentando juicio son: Fernando Rivera, Miguel Colorado González. El resto son, Jorge Alberto Zavala Segovia, Luis Manuel Aguilar Flores, Arturo González Rodríguez, José Manuel Ramírez Cabañas, Moisés Minutti Mioni, Mateo Juárez Vázquez, entre otros.

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