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Política

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Robles fracasa en diálogo con delegados

Luego de casi cuatro horas de una primera negociación, el gobierno capitalino, los delegados de Iztapalapa, Álvaro Obregón, Tlalpan y Gustavo A. Madero y la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles, no lograron alcanzar un acuerdo para llevar a cabo la Cruzada Nacional contra el Hambre en la ciudad de México.

Luego de casi cuatro horas de una primera negociación, el gobierno capitalino, los delegados de Iztapalapa, Álvaro Obregón, Tlalpan y Gustavo A. Madero y la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles, no lograron alcanzar un acuerdo para llevar a cabo la Cruzada Nacional contra el Hambre en la ciudad de México.

El jefe del GDF, Miguel Ángel Mancera, dio un escueto posicionamiento de tres minutos en el que afirmó que se acordó instalar mesas técnicas para hacer un intercambio de información sobre las reglas de operación y evaluación de este programa federal.

Entrevistado luego del encuentro, Jesús Valencia, delegado de Iztapalapa, manifestó que se trató de una reunión donde no hubo avance: Fue nada más que un diálogo político y nada más. No ganamos nada. Iztapalapa no gana nada, al día de hoy. Yo no veo ni un avance .

Valencia Guzmán expuso que Robles le dio una negativa rotunda a su demanda de destinar 1% del presupuesto de la Cruzada para resolver una de las principales demandas, como la falta de agua. En el mismo tenor se encuentra la demanda del delegado de Álvaro Obregón, Leonel Luna, quien pidió que se destinen fondos para atender el problema de barrancas en dicha demarcación. No acordaron nueva fecha de reunión.

Un intenso debate se dio entre los jefes delegacionales, la Secretaria de Desarrollo Social y el Mandatario capitalino, por el manejo y reglas de operación de la Cruzada Nacional contra el Hambre.

Rosario Robles arribó 36 minutos más tarde, entró por la puerta que cruzaba cuando era Jefa de Gobierno. Luego de tres horas de negociación, emitieron su posicionamiento.

Entrelazados de los brazos, como símbolo de fuerza entre las diversas corrientes perredistas, Jesús Valencia, delegado de Iztapalapa (marcelista); Marcela Contreras, de Tlalpan; Leonel Luna, de Álvaro Obregón, (ambos pertenecientes a IDN), y Nora Arias, de Gustavo A. Madero (Fuerza Democrática), entraron al Antiguo Palacio del Ayuntamiento.

Por su parte, el dirigente del PRD-DF, Manuel Oropeza, de la corriente de René Bejarano, fuerte opositor de la Cruzada y quien mantiene un conflicto con la funcionaria federal, arremetió en su contra al afirmar que es una operadora electoral del PRI: Su papel es más bien de secretaria de asuntos electorales del PRI que de Secretaria de Desarrollo Social .

Oropeza alertó que lo que está de fondo es el contenido real de la Cruzada, la cual obedece a lo electoral: Una cruzada por los votos. No es gratuito que Peña le haya dado su espaldarazo haciendo oídos sordos a lo que se ha denunciado .

El líder capitalino de la izquierda dijo que tras lo acontecido en Veracruz, la exjefa del GDF no tiene ninguna autoridad.

Comentó que su homólogo a nivel nacional, Jesús Zambrano, ha dicho que el PRD impulsará juicio político y la destitución de Rosario Robles, a quien consideran una interlocutora no válida.

Finalmente, el perredista dijo que este programa debería estar enfocado a los 400 municipios más pobres del país y ninguno de ellos está en el DF. Sin lugar a dudas, el PRI está buscando a través de esto generar una estructura, una relación clientelar con la gente que tiene necesidad en el DF .

veronica.macias@eleconomista.mx

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