Buscar
Política

Lectura 3:00 min

Sistema presidencialista dificulta diálogo entre fuerzas: expertos

Necesario que partidos recuperen legitimidad ante los ciudadanos, opinan.

El presidencialismo en México es un sistema agotado que en la actualidad dificulta el diálogo entre las diversas fuerzas políticas, por lo cual es necesario avanzar hacia un régimen semiparlamentario, expusieron expertos.

“La propia estructura del Supremo Poder Ejecutivo de la Unión dificulta el diálogo político, pues, en este esquema, el que gana ‘gana todo’ en términos de posiciones en el gobierno. Por ello se ha propuesto la construcción de un régimen semiparlamentario en el cual se separe la jefatura del Estado de la jefatura del Gobierno”, se indicó en el ensayo “El desarrollo frente a la pandemia: nuevosescenarios, nuevos retos”, a cargo de los especialistas Mario Luis Fuentes y Saúl Arellano, que pertenece al “Informe del Desarrollo en México. Coordenadas para el debate del desarrollo”, publicado por el Programa Universitario de Estudios del Desarrollo (PUED) de la UNAM, que fue presentado ayer.

En dicho ensayo se alertó que en nuestro país se vive una ofensiva del poder Ejecutivo, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, en contra de los organismos autónomos —concebidos como contrapesos al mismo Ejecutivo federal—, bajo el argumento de que han sido cooptados por grupos de poder que los han puesto al servicio de intereses ajenos o contrarios al propósito constitucional y legal para el que fueron creados.

Por otra parte, los autores indicaron que en la democracia la discusión sobre los asuntos más relevantes está mediada fundamentalmente por los partidos políticos, los cuales en México pasan por una severa crisis de legitimidad.

Y es que, según se recuerda, la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) del 2019 arrojó que, en una escala del 1 al 10, los ciudadanos asignaron una calificación de 3.8 al desempeño de los partidos políticos.

“Sin un sistema de partidos políticos competitivos, que respondan a las expectativas de la ciudadanía en materia de bienestar, empleo, seguridad pública y, en general, toda la agenda que es su responsabilidad, la democracia no podrá consolidarse, pues, como lo habría sostenido Jorge Carpizo, ‘el Estado de derecho es un Estado social o no es Estado de derecho’”, se precisó.

Institucionalidad precaria

Durante la presentación del documento del PUED,  Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, excandidato presidencial y líder moral de la izquierda mexicana opinó que la debilidad del Estado mexicano es algo de lo que poco se habla, sin embargo, resulta fundamental abordarla para que México salga de sus problemas actuales.

“Habrá que reconocer que nuestra institucionalidad estatal es precaria, incapaz de cumplir tareas básicas de gobierno con mínima eficacia, universalización de los sitios constitucionalmente obligatorios de la educación, garantizar la salud, el ejercicio del derecho al trabajo, acceso al agua y vivienda, etcétera.

“En condiciones actuales, crecimiento y paz social demandan que el Estado se apodere y rescate territorios y actividades que hoy controla y en los que hoy impera la delincuencia.

Que su presencia se imponga mediante implantación y expansión de proyectos productivos”, expresó.

Por su parte, Alfonso Ramírez Cuéllar, coordinador del Grupo de Trabajo para la Transición Hacendaria, planteó que, para el desarrollo del país, es necesario conseguir la fortaleza financiera de los estados y los municipios mediante las reformas del predial y la tenencia vehicular.

Así como la progresividad del ISR en las personas físicas; pelear los beneficios de los impuestos mínimos a las multinacionales y el control de la tasa efectivamente pagada de los grandes contribuyentes del país.

ivan.rodriguez@eleconomista.mx

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas